Una comida de Hogueras, el pretexto para la crisis de Cs en Alicante que se deriva de los sueldos públicos
La vicealcaldesa de Alicante: "Quizá no sea el mejor momento de tomar la decisión de relevar a la cúpula provincial de Cs a las puertas de las fiestas".
18 junio, 2022 02:49El portavoz de Ciudadanos (Cs) en la Diputación de Alicante, Javier Gutiérrez, y la portavoz en el Ayuntamiento de la capital, Mari Carmen Sánchez, llevan tiempo organizando una comida para verse con sus "amigos" del partido en las que serán las Hogueras del "reencuentro", tras dos años de pandemia. Un pretexto utilizado contra ellos en la última crisis de Cs Alicante.
Fuera de los canales del partido, con acceso a parejas y familiares, han invitado en el restaurante El Sorell mañana domingo a sus colaboradores de toda la provincia. Será a las 14.45 horas y pretende celebrar ese ansiado "reencuentro festivo", como lo hacen todo tipo de organizaciones en la ciudad.
Según ha podido saber este diario, la noticia del relevo de Gutiérrez como coordinador provincial del partido; de César Martínez, responsable de Institucional; y de Chechu Herrero, de Organización, está relacionada con esta comida y según fuentes de Cs Alicante, con la tergiversación de los objetivos de este encuentro.
Las mismas fuentes aseguran que desde la cúpula autonómica del partido se ha trasladado a Madrid que esa comida es un acercamiento al PP, con quienes Gutiérrez y Sánchez trabajan a diario en los gobiernos de la Diputación y el Ayuntamiento. No en vano Martínez y Herrero son los hombres fuertes de Gutiérrez y Julia Parra (vicepresidenta) en la institución provincial. Algo que sus entornos niegan.
Y quizás a eso se deba la visita exprés de esta semana del coordinador nacional de Organización, Borja González, para transmitirles la decisión de su relevo. Sobre todo, porque González alabó el trabajo de los tres pero consideró que hay que "impulsar" la actividad de Cs a un año de elecciones. Una tarea que debería corresponder a la secretaria autonómica de Organización, la alicantina Teresa Ortiz.
De hecho, es a Ortiz a quien las mismas fuentes colocan como urdidora de la operación para descabezar la cúpula de Alicante. Y es que la animadversión entre los dos sectores de Cs es más que manifiesta después de años de amistad personal con Gutiérrez.
Pero ¿de dónde nace esa enemistad? Fuentes cercanas a Gutiérrez aseguran que todo se truncó cuando Ortiz accedió a las responsabilidades de Organización y solicitó un sueldo de la Diputación para dejar su trabajo privado como economista en una clínica para poder dedicarse en exclusiva al partido.
Las mismas fuentes explican que ya estaban ocupados ocho de los nueve cargos de libre disposición del partido en la Diputación, y que se le ofreció un puesto de asesor de segundo escalón que quedaba libre. Los dos puestos de primer escalón estaban ocupados por Martínez y Herrero. Al parecer, ella lo consideró un insulto y comenzó la mala relación.
Ortiz desmiente haber solicitado ningún puesto laboral remunerado a Ciudadanos. Actualmente compagina su actividad profesional con la actividad a cargo de la secretaría de Organización, dedicándose a la actividad política de manera completamente vocacional
. Otras fuentes de Cs aseguran que no hay constancia de esta petición. En cualquier caso Ortiz entró como vocal del Consejo Asesor de Suma, el ente tributario de la Diputación donde cobra una indemnización por asistencia a reuniones.
Según los afines a Gutiérrez, también se pidió, siempre según las mismas fuentes, la contratación en Diputación de la secretaria de la sede autonómica de Cs aun cuando no estaba previsto que trabajase para la institución provincial en Alicante. Gutiérrez se negó.
Una mala relación que se intensificó cuando se propuso una moción de censura en Orihuela y el entonces responsable de Institucional, Jesús Gimeno, con apoyo de Madrid, se opuso a pactar con Podemos (Cambiemos). Ortiz se alineó con el diputado nacional oriolano, Juan Ignacio López Bas y a la sede nacional del partido llegaban mensajes contradictorios.
Mensaje de Sánchez
En medio de estos polémicos ceses orgánicos, Mari Carmen Sánchez emitió ayer un comunicado en el que afirmaba que "no voy a permitir que en la ciudad de Alicante se genere inestabilidad".
"Quizá no sea el mejor momento de tomar la decisión de relevar a la cúpula provincial de Cs a unos días de las elecciones andaluzas y a las puertas de las fiestas oficiales de la capital de la provincia", señaló la portavoz, quien se mostró "esperanzada" en que "los compañeros que asuman estas responsabilidades sean personas de consenso y que sigan trabajando por los intereses de la ciudadanía".
En opinión de Sánchez, "el coordinador provincial ha realizado una magnífica labor durante estos años y seguirá realizándola en sus responsabilidades en la Diputación Provincial como lo ha hecho hasta ahora".
La vicealcaldesa también afirmó que "esta reestructuración del partido no afectará a nuestros objetivos ni a nuestro trabajo en favor de los alicantinos que estamos realizando a través del Pacto de Gobierno suscrito en el Ayuntamiento de Alicante".
"En el Ayuntamiento de Alicante tenemos un equipo de gobierno estable y cohesionado". "Un equipo que ya lleva cumplido un 80% del Pacto de Gobierno cuando aún falta un año de mandato", añadió. "Este es el camino que busca Cs desde sus orígenes, el de la gestión, el consenso y el diálogo", remarcó.
Por otra parte, Sánchez aseguró estar "convencida de que estos últimos movimientos en el partido no afectarán en absoluto a los resultados de las elecciones andaluzas". "A nuestro candidato Juan Marín le deseo la mejor de las suertes, su trabajo y su gestión junto con su equipo lo avalan", ha destacado.
Al mismo tiempo, explicó que "siendo las primeras fiestas oficiales de Alicante en este mandato tras la obligada suspensión por la pandemia, por motivos obvios como vicealcaldesa mi lugar está en Alicante para velar para que estas Fogueres de Sant Joan sean las mejores de la historia".