Alicante

El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández, reflexiona sobre los retos y los objetivos económicos que se deben abordar durante los próximos años en el país y en Europa durante una conferencia celebrada este lunes en la Universidad de Alicante (UA). Entre las metas a perseguir ha destacado la baja productividad en España, una lacra que considera "histórica".

El gobernador ha pedido reformas estructurales para abordar la falta de convergencia en renta per cápita causada "por la elevada tasa de paro que tenemos y la baja productividad", asuntos que para Hernández son "fundamentales".

Otro reto para el año 2024 es reducir el déficit, "una de las mayores vulnerabilidades de la economía española", según el economista. Para ello, el dirigente ha apostado por con "un ajuste fiscal a varios años, detallado y creíble".

[El Banco de España espera que la economía se recupere en 2024 "por encima de la zona euro"]

El Banco de España ha recomendado en política monetaria mantener el nivel de los tipos a largo plazo para alcanzar el 2 % de inflación para 2025, la cifra propuesta por el Banco Central Europeo.

Así, el director ha demandado una política presupuestaria para el sostenimiento de las rentas en los hogares, aunque ha avisado de que "hay que ir retirando las medidas de lucha contra la inflación". 

Sin embargo, el máximo responsable de la institución ha asegurado que en caso de que los precios energéticos subieran a causa del conflicto entre Israel y Palestina, las ayudas serían "más localizadas para ayudar a los hogares y empresas más afectadas".

El gobernador también ha incidido en el papel supervisor de los bancos y ha explicado que en un contexto donde obtienen beneficios tiene que primar la "prudencia para destinar una parte de los beneficios a aumentar la resiliencia con reservas". 

Incertidumbre en Europa

Esta petición la ha extendido al ámbito europeo para dotar a la unión económica y monetaria de gobernanza fiscal. Un pacto de estabilidad que es, según el dirigente, "fundamental para garantizar la sostenibilidad y mejorar los colchones en épocas de bonanza para usarlos en épocas de recesión". Esta reforma se espera que se apruebe antes de finalizar el año por el Banco Central Europeo.

De esta forma, el Banco Central planea afrontar el "panorama de incertidumbre" que experimenta Europa debido a la Guerra de Ucrania y al aumento de la tensión en el conflicto en Oriente Medio. "Los retos mundiales son los bienes públicos, la economía estratégica y el cambio climático", ha manifestado Hernández, quien cree que estas materias "tienen que abordarse en Europa y no nacionalmente".

"Falta completar la unión bancaria", ha lamentado, porque los ciudadanos nacionales se responsabilizan si hay problemas con los bancos, lo que debería "hacerse con fondos europeos", ha concluido el experto.