María Dangla lleva la cara de su marido tatuada.

María Dangla lleva la cara de su marido tatuada. Miquel Hernandis

Alicante REPORTAJES

María Dangla, la alicantina a la que su marido creyó quemar viva en una furgoneta: "Si sale libre, me mata"

El pasado miércoles, la Policía detuvo a un hombre en una peligrosa persecución tras incendiar un vehículo en un descampado de la ciudad.

14 septiembre, 2024 02:35
Alicante

"Tengo miedo por mis hijas, por la gente a la que ha amenazado y por todos". María Dangla está conmocionada. Apenas ha descansado y siente una mezcla de preocupación y nervios por lo que sucederá este sábado con su marido, que está detenido por incendiar un vehículo, darse a la fuga y golpear a varios policías, el pasado miércoles en Alicante.

Según afirma la alicantina, de 47 años, su esposo incendió la furgoneta de otra persona, en pleno brote, pensando que ella estaba en su interior en compañía de otra persona. "Para mi marido, ese día él me quemó viva". Y no solo eso. Se quedó junto al vehículo viendo como ardía, hasta que la Policía lo identificó y comenzó la persecución, que terminó con un autobús urbano estrellado en el barrio de Colonia Requena.

María Dangla, quién se dedica profesionalmente al flamenco, denuncia haber sufrido maltrato tanto físico como psicológico durante años por parte de su marido, que incluso llegó a darle una paliza delante de sus hijas.  El hombre, de 49 años, regenta un gimnasio en la ciudad de Alicante, aunque desde octubre de 2023 se encuentra de baja. Diagnosticado con esquizofrenia, el hombre no seguía el tratamiento de forma adecuada, consumía drogas, y es ahí cuando comienzan los problemas. "Me veía en todos sitios", describe ella.

A su marido, un hombre celoso y controlador, se le había metido en la cabeza que ella podía estar siéndole infiel. La alicantina muestra los audios que él mismo le había enviado a una de sus hijas hablando mal de ella: "Como me has engañado que tu madre no hacía nada, en vez de decírmelo. ¿Sabes que está ahí follando con el Mario y con más gente en el hotel Santa Faz y anoche estuvo en el coche follando con el Mario...". 

María explica que su marido ya llevaba un par de años mal, pero que las cosas empeoraron en 2023, cuando él podía pasar más de 18 días consumiendo drogas. En diciembre del año pasado, las encerró a ella y a su hija menor en su vivienda y no las dejaba salir. Tuvieron que intervenir las autoridades. Y no, no era la primera vez que ocurría algo similar, pero María no quería denunciar porque ella lo veía a él como alguien enfermo.

Emocionada lo describe como a "el hombre de mi vida", pero no quiere estar con él porque sabe que eso puede costarle la vida. El 17 de agosto de este año, la familia se va de vacaciones a un resort de Crevillente. "Lo veíamos muy raro porque me dejaba ir sola a la piscina con las niñas", afirma.

 

La bailaora cree que su marido les estaba permitiendo un 'respiro' porque él sabía que a la vuelta a casa volvería a consumir. Y así fue. El 23 de agosto, él regresa a la vivienda que comparten en San Vicente del Raspeig y le pega una paliza. Son las hijas de María, de 14 y 20 años, las que llaman a los servicios de emergencia, y María pasa unos días ingresada en el hospital.

En ese momento, ya no tiene dudas. Sabe que ha llegado el momento de denunciar a su marido, al que finalmente le imponen una orden de alejamiento. Según describe la alicantina, su marido había estado varias veces en rehabilitación. Habían probado con todo, desde terapia de pareja, hasta participar en 'Proyecto Hombre'. Pero muchos profesionales le daban como un caso perdido, ya que él no quería dejar de consumir. "El siempre decía que le encanta la droga". 

17 años de relación

María Dangla y su marido se conocieron cuando ella tenía ocho años: "Siempre me ha gustado", describe. En ese momento, no surgió nada ya que María se fue unos años a vivir a Madrid para poder seguir formándose en la danza. Unos años más tarde, el destino los volvió a unir en Alicante y comenzaron una relación.

Ella cuenta como los primeros años de la relación fueron bien, hasta el momento en el que nació su hija. Todavía recuerda los primeros insultos y los comentarios mal intencionados, que ya avisaban de que algo no marchaba bien. "Yo en ese momento estaba muy enamorada", describe.

Ahora, 17 años después del comienzo de esa relación y con los papeles del divorcio en marcha, María pide a otras mujeres que no dejen pasar ni una, que se vayan al primer insulto. Y cuenta su historia para que ninguna otra mujer tenga que sufrir la violencia machista.

En este momento, su marido está detenido por los hechos del pasado miércoles, pero su destino todavía es incierto. Aunque María teme por su vida y por la de sus hijas si su esposo queda en libertad: "Si sale libre, me mata", concluye.