Alicante regula por primera vez sus fiestas y rechaza la "catalanización" de la Educación en la Comunidad

El pleno del Ayuntamiento de Alicante ha aprobado este miércoles la primera ordenanza reguladora de las fiestas tradicionales de la ciudad, que contempla las Hogueras, la Semana Santa, los Moros y Cristianos, la Romería de la Santa Faz y las fiestas de los barrios.

En la sesión plenaria correspondiente al mes de diciembre, la normativa se ha aprobado con los votos del Partido Popular, Ciudadanos, PSOE, Compromís y Vox, en una ordenanza que concreta los calendarios de cada celebración, los actos que las componen, los horarios autorizados y los espacios públicos previstos para su desarrollo.

Por su parte, los dos concejales de Unidas Podemos EU se han abstenido al argumentar que la ordenanza "no incluía medidas para garantizar que no se procure un trato inadecuado a los animales que puedan participar en los actos festivos".

Voluntad de diálogo

Tanto el edil socialista Manuel Marín como el portavoz de Compromís, Natxo Bellido, han agradecido "la voluntad de diálogo" manifestada por el edil de Fiestas, Manuel Jiménez (PP), con el propósito de lograr el mayor consenso posible en la elaboración del texto, al tiempo que han agradecido el "exhaustivo trabajo" efectuado por los técnicos.

Por otra parte, el pleno también ha aprobado una propuesta de declaración institucional promovida por PP y Cs en la que se expresa el "rechazo a la imposición lingüística del valenciano en la Comunidad Valenciana y en la ciudad de Alicante".

En la defensa de la declaración, la edil de Educación, Julia Llopis (PP), ha señalado que en la Comunidad "se está produciendo una 'catalanización' como consecuencia de las políticas desarrolladas por el conseller de Educación y Cultura, Vicent Marzà, en contra de la libertad de elección de los padres".

Tras el debate, la iniciativa ha prosperado con los votos de los dos partidos aliados al frente del Ayuntamiento (PP y Cs) y de Vox, mientras que PSOE, Unides Podem EU y Compromís han votado en contra.

Y en 2026 se ha fijado la obligación de que todos los alumnos, hayan estudiado o no valenciano por ser "exentos", estén obligados a examinarse en las pruebas del acceso a la universidad de esta lengua.

Como ha venido informando este diario la Ley de Plurilingüismo aprobada en 2018 que impone ya el 25% de asignaturas troncales en valenciano a castellanohablantes que pueden haber solicitado la exención de cursar la asignatura lingüística.

Los representantes de las tres formaciones del eje progresista -Paco Sanguino, Xavier López y Natxo Belllido, respectivamente-, han considerado que la declaración se fundamenta en "mentiras" y han incidido en que "los proyectos docentes de los centros los aprueba cada comunidad educativa, en la que están representados los docentes y los padres".