Una rata ha sido la causante de que una aseguradora haya indemnizado a un cliente con 971 euros por los daños ocasionados en su vivienda de Alicante. El roedor habría entrado por un agujero en la pared causado por los golpes de otro vecino cuando intentaba aparcar su vehículo en el garaje.
Este individuo se ofreció a arreglar él mismo el agujero y matar al roedor para evitar dar parte al seguro. Finalmente, tapo mal el agujero y no se deshizo de la rata, la que permaneció allí encerrada provocado daños en el inmueble.
Según informa Facua, entidad a la que acudió la afectada para que ejerciera acciones en defensa de sus derechos, la rata había provocado daños materiales por valor de 573 euros en la vivienda de la afectada, de Alicante, en junio de 2020.
La mujer contrató a una empresa especializada en control de plagas para acabar con la rata y dio parte a su aseguradora (Reale) con el objetivo de arreglar el agujero y reclamar el coste al vecino, que era asegurado de Liberty.
Esta compañía argumentó que, a pesar de que ella había solicitado un cambio de titularidad, el seguro de la casa seguía a nombre de su exmarido y era él quien debía reclamar, según afirma Facua, entidad a la que recurrió la mujer tras casi un año de reiteradas llamadas a su aseguradora.
Tras analizar la información, el equipo jurídico de Facua reclamó a Liberty una indemnización por los daños materiales ocasionados por la rata, el reembolso de lo que costó la contratación de la empresa de control de plagas y la reparación del agujero originado en la pared.
Al cabo de una semana, Liberty comunicó a la usuaria que correría con todos los gastos dado que su vecino había reconocido los daños provocados en la pared, y le abonó 338 euros por la reparación del agujero, 60 euros para el pago de la empresa especializada en control de plagas y 573 euros en concepto de los daños materiales originados por la rata.
Otras sobre ratas
Y mientras algunas ratas causan grandes destrozos en viviendas, las hay otras que son capaces de detectar minas antipersona en Camboya. Como es el caso de Magawa, un roedor condecorado por salvar vidas y que murió el pasado fin de semana a los 8 años.
"Magawa se encontraba en buena salud y empleaba la mayoría de su tiempo jugando con su habitual entusiasmo. A medida que se acercaba el fin de semana parecía más lenta y dormía más, al mostrar menos interés por la comida en sus últimos días", apuntó este martes en un comunicado la oenegé encargada de su adiestramiento y cuidado.
Magawa se jubiló el pasado junio tras cinco años de trabajo en los que su olfato le ha permitido encontrar más de 100 minas y bombas sin estallar en el segundo país más afectado por este tipo de armas después de Afganistán.