Más de 400 voluntarios han colaborado este domingo en los trabajos de reforestación de la Sierra del Porquet, ubicada en el barrio de San Gabriel de Alicante, con la plantación de 200 cipreses y 10.000 semillas en un terreno de 10.000 metros cuadrados.
Esta actuación ha sido organizada por la Asociación Enamorados de Alicante con el impulso de la concejalía de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Alicante, dentro del proyecto Alicante Renace, que propone recuperar los ecosistemas alicantinos, crear conciencia ecológica y poner en valor los espacios naturales de la provincia.
En total, se han plantado más de 200 plantones de la especie tetraclinics o ciprés de Cartagena y más de 10.000 semillas, con el fin de mejorar las condiciones y aprovechar la inversión en el proyecto de goteo existente y 300 niños han realizado además diferentes talleres ecológicos.
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"Hace unas semanas estuvimos en una nueva reforestación de la sierra de Orgegia y ahora seguimos en la Sierra del Porquet implicando además a los vecinos de San Gabriel y fomentando las labores de voluntariado ecológico en familia", ha señalado el concejal de Medio Ambiente en Alicante, Manuel Villar.
Por su parte, Daniel Aguilar, presidente de la Asociación Enamorados de Alicante y fundador del proyecto Alicante Renace, ha agradecido el apoyo de los cientos de vecinos que "nuevamente han acudido a la llamada de voluntariado medioambiental, su implicación y su amor por nuestros ecosistemas".
Aguilar ha resaltado además que el proyecto Alicante Renace tiene prevista una siguiente actuación a finales de invierno en 2024, que se anunciará próximamente en su web.
'Superbichos' come plásticos
En la misma línea de conservación del medioambiente, el proyecto europeo Recover en el que participa la Universidad Miguel Hernández de Elche quiere luchar contra el material en estos espacios utilizando una combinación de biología y tecnología que tiene como protagonistas a los insectos. La iniciativa, liderada por la Universidad de Almería y en la que colaboran una decena de universidades, entidades y empresas, quiere aportar una solución innovadora que limpie los suelos y la materia orgánica de microplásticos.
Para ello, han seleccionado a los mejores insectos para esta tarea. Recover emplea gusanos de la harina y diferentes tipos de moscas y lombrices capaces de triturarlos para hacer una cadena en la que se vayan degradando los polímeros conforme pasan por el sistema digestivo y las enzimas de uno a otro.
El proyecto persigue tres principales objetivos: eliminar gran parte de los residuos que dañan los suelos y que complican el reciclaje, crear un biofertilizante con las heces de los insectos y fabricar plásticos biodegradables usando los exoesqueletos de los mismos.