El Plan Ensanche Levante de Benidorm da sus últimos pasos: se empezará a edificar en 2023 o 2024
El proyecto, que contempla una inversión de 570 millones, está a la espera de la Declaración Ambiental y Territorial Estratégica de la Generalitat.
28 febrero, 2022 13:11Noticias relacionadas
El Plan Ensanche Levante de Benidorm encara este año 2022 la última fase de tramitación de planeamiento, según han informado fuentes de la promotora del proyecto en un comunicado. Una vez remitida la propuesta por el Ayuntamiento de Benidorm a la Generalitat, se está a la espera de la preceptiva Declaración Ambiental y Territorial Estratégica, pronunciamiento que se espera positivo toda vez que los principales informes sectoriales con relevancia ambiental son favorables.
Llegados a esta fase del proceso, los promotores del plan señalan que la recesión que se ha vivido durante los dos últimos años "ha tenido una causa perfectamente identificada" y ajena al modelo urbanístico de Benidorm. "Como vemos en Poniente", ese modelo "goza de buena salud y de la confianza inversora de consumidores de la marca Benidorm en sus diferentes facetas".
Específicamente, el plan Ensanche Levante supone rematar la ordenación de la zona de Levante hasta la Avenida de la Comunitat Valenciana (antigua carretera nacional), ya prevista en el Plan General de 1990 y que tuvo un primero intento de ordenación fallido, debido a que el primer Plan Parcial fue anulado en los tribunales de justicia en 2012.
Este remate "permite resolver diferentes problemas pendientes, tales como complementar dotaciones públicas, sobre todo zonas verdes y espacios con una vocación polivalente, que se convertirá en un gran sumidero de CO2, un nuevo pulmón para la ciudad que refuerza la estrategia municipal frente al cambio climático". La idea es que se concrete una inversión total de 570 millones en esta zona.
El factor movilidad
Otro aspecto positivo, según la promotora, pasa por habilitar nuevos escenarios de movilidad para descongestionar arterias viarias hoy colapsadas en determinadas épocas del año, y sobre todo recuperar como un activo para los vecinos un espacio degradado "cuya imagen es incompatible con el modelo de ciudad que hoy representa Benidorm a nivel nacional e internacional".
Con este contexto, los números del Plan Parcial del sector Ensanche Levante son "razonables y muy proporcionados", teniendo en cuenta que proveerá a la ciudad de ese número de viviendas y alojamientos turísticos a lo largo de la próxima década, "siendo lo normal que en ese período los proyectos se concentren de nuevo en la zona de Levante aprovechando el impulso del plan".
La construcción de diferentes productos inmobiliarios (alojamientos turísticos, residenciales y locales comerciales) se realizará de forma gradual en el tiempo, y lógicamente se ajustará a la demanda del mercado en cada momento. Se trata, como todo proyecto urbanístico, de una apuesta, "pero al fin y el cabo es una apuesta que tiene un apoyo relativamente seguro, pues lo que se está haciendo es replicar el modelo urbano de Levante, donde hay un mix turístico-comercial muy acentuado", señala Rafael Ballester, director técnico del Plan.
Evidentemente, la réplica que el plan propone "trata de corregir y complementar los aspectos mejorables de esta zona de la ciudad, sobre todo en materia de reserva de espacios dotacionales para el esparcimiento de residentes y turistas", y "especialmente la adopción de criterios de sostenibilidad en la urbanización y edificación acordes a lo que la sociedad demanda en esta materia actualmente".
Proceso administrativo
Tras la Declaración Ambiental del proyecto, que debe emitir la Generalitat, se producirá la aprobación definitiva del Plan Parcial, y a partir de ahí comenzará lo que se llama "fase de gestión", en la que la Agrupación de Interés Urbanístico que está impulsando el proyecto formalizará el programa y el proyecto de urbanización, cuya aprobación corresponde al Ayuntamiento.
A partir de ahí, el protagonismo será para el Proyecto de Reparcelación, que es lo que permite ceder formalmente al Ayuntamiento el suelo público y repartir el suelo privado entre los propietarios incluidos en el sector. Superada esta fase de gestión, comenzará la ejecución de las obras de urbanización, y con ello, la posibilidad de pedir licencias para edificar de forma simultánea, y esto debería ser posible entre 2023 y 2024.
El sector geográfico afectado es el referente estratégico de la zona de Levante en Benidorm, y por diversas circunstancias no ha sido posible su desarrollo hasta la actualidad. Esto ha propiciado que el escenario del desarrollo urbanístico reciente se haya concentrado en Poniente, con proyectos emblemáticos promovidos por grupos empresariales de gran solvencia. Esto demuestra que la marca Benidorm genera una gran confianza en los inversores, "que en mi opinión están transformando de forma exitosa esta parte de la ciudad", enfatiza Ballester.