Alicante

Borja Martínez regresará el sábado al Rico Pérez como rival. El alicantino, formado en la cantera herculana, no se perdió durante años un partido del equipo blanquiazul, en el que soñaba jugar, aunque a veces los sueños, cuando se cumplen, no son precisamente lo que uno esperaba.

El actual extremo del Intercity fue un niño prodigio de la cantera herculana. Fue goleador y capitán de varios conjuntos formativos y con 16 años ya ascendió al primer equipo para entrenar en Primera junto a Trezeguet o Valdez. Poco después llegó su estreno en Segunda con el primer equipo, en Lugo, de la mano de Quique Hernández.

Al final de esa temporada fue traspasado al Espanyol, dando inicio una vida nómada que lo llevó por toda España –León, Lorca, Zaragoza, Elche e Ibiza-, con un billete de ida y vuelta envenenado al Hércules. Regresó al Hércules en el peor momento posible, ya que sólo la pandemia evitó un descenso a Tercera, y luego fue cedido al Ibiza. Su ficha fue inasumible por el club, que acabó rescindiendo su contrato tras la caída a Segunda Federación.

Ya en plena madurez futbolística, tras cumplir los 30 años, ha decidido regresar a Alicante, aunque a otro club de la ciudad. El sábado no oculta, en declaraciones a los medios del Intercity, que vivirá un partido "especial" en un escenario en el que no pudo triunfar.

"Estuve en diferentes etapas, crecí allí como jugador y he pasado muy buenos momentos", afirma sobre su estancia en el Hércules. El alicantino no duda en elogiar la "grandeza" de la afición herculana, de la que formó parte un día, así como el volumen de su "masa social", por lo que deseó "que venga mucha gente y haya un ambiente bonito" en el estadio.

"Ahora defiendo los intereses del Intercity y lo importante son los tres puntos, creo que hemos comenzado bien y espero seguir ayudando al equipo", señala.

Sin olvidar la trascendencia de los tres puntos, para Borja Martínez este partido es casi un oasis en la competición. "Este derbi que ha surgido en los últimos años es un aliciente para la ciudad, es positivo", asegura.

Lo bueno del derbi

"Como alicantino que soy, que dos equipos de la misma ciudad estén en categorías altas es beneficioso, esperamos que sea una fiesta del fútbol en Alicante y que la gente venga a animar a su equipo, a pasárselo bien y nosotros intentaremos llevarnos la victoria", añade el extremo de Intercity

En cuanto al momento anímico del Intercity, Borja Martínez reconoce que fue doloroso perder el liderato tras empatar con el filial del Atlético con un penalti en el tiempo de descuento, si bien afirmó que según pasan los días "se le da valor al punto".

"Siempre duele perder puntos de esta manera, pero nos hemos repuesto y estamos mentalizados para el partido ante el Hércules, un rival complicado, un gran equipo y que saldrá a por todas", finaliza.