Apenas una semana después de finalizar la competición, la Fundación Lucentum comienza a tomar decisiones trascendentes para su futuro. La primera de ellas ha sido romper de forma unilateral el contrato del entrenador Gonzalo García de Vitoria, quien no seguirá en el HLA Alicante la próxima temporada a pesar de tener un año más firmado.
El preparador bilbaíno ha sido víctima del mal final de curso del equipo, incapaz de colarse en la lucha por el ascenso. Ni la plaga de lesiones que ha sufrido el equipo en el último tercio de la competición ni los parones derivados de los brotes Covid, que frenaron el despegue el equipo, han sido coartada para los dirigentes, para quienes han pesado más argumentos como la irregularidad en el juego o no sacar todo el rendimiento posible de la plantilla.
García de Vitoria llegó al club alicantino el pasado verano como relevo del carismático Pedro Rivero con el objetivo de iniciar un nuevo proyecto a medio y largo plazo. El vasco aterrizó con la ilusión por bandera, ya que Alicante suponía un gran reto en su carrera tras una dilatada trayectoria en la LEB, donde había logrado ascensos y también sufrido la amargura de un descenso.
El entrenador no tardó en ganarse a todo el mundo en el club por su discurso directo y su capacidad para comunicar, pero los resultados no le han acompañado. Un mal arranque de competición, en la que fue la peor racha de siempre del equipo de salida, lastró al HLA Alicante, que logró posteriormente estabilizar su trayectoria, para desplomarse definitivamente en el último tercio de la Liga, donde dejó escapar la posibilidad de meterse en la pelea por el ascenso.
La exigencia del ascenso
García de Vitoria llegó a Alicante para llevar a cabo un proyecto que a medio plazo pudiera llevar al HLA a la ACB, pero la fusión de la Fundación Lucentum con Intercity cambió de golpe el objetivo y el ascenso pasó a ser una exigencia para la que ni el entrenador ni el equipo demostraron estar preparados.
El club, a través de un comunicado, ha querido agradecer la "profesionalidad, máxima dedicación y esfuerzo" del entrenador vasco durante el tiempo al frente de nuestro equipo, así como le desea "la mayor de las suertes en su futuro tanto personal como profesional". La Fundación Lucentum no ha informado aún del sustituto del entrenador vasco, ya que se barajan varias opciones.