La tecnología es una herramienta estratégica para los municipios a corto, medio y largo plazo tanto para la gestión de los servicios públicos como para la mejora de la calidad de vida de los ciudadanos. Las nuevas tecnologías permiten calibrar o reconducir sus objetivos de las ciudades, pero sobre todo, incidir en la sostenibilidad de los municipios para cumplir con la Agenda 2030, los objetivos fijados por la comunidad mundial para los próximos 8 años.
Con esta premisa, Hidraqua y EL ESPAÑOL De Alicante reunieron el pasado lunes en Dinapsis Benidorm a representantes empresariales e institucionales en el ámbito de la innovación para conocer de primera mano qué se está haciendo ya en materia de sostenibilidad en las ciudades. Pero sobre todo, que se puede hacer a medio plazo.
"Lo que no se puede medir no se puede comparar, no nos da una referencia de dónde estamos. Lo primero es ver con qué contamos y a qué aspiramos, y luego trazar planes estratégicos", resumió el alcalde de Benidorm, Toni Pérez, en la primera intervención del encuentro.
Y es que la gestión de los datos, su gobernanza institucional, protagonizó buena parte del debate. "Hay que confiar en el análisis de los datos, para estudiar, organizar y tomar decisiones. Para trazar caminos. Por tanto, el mensaje es que sin duda todas las ciudades ya llegamos tarde, que todas las ciudades de más de 50.000 habitantes deberían estar abordando este asunto con un plan claro, incluso cualquier espacio en el que haya vida humana".
Pero antes, hay que adaptar muchos de los procedimientos administrativos a los nuevos tiempos: "La administración como sistema, quizás no está preparada para ello y hablamos mucho de la colaboración público-privada y debemos hablar también de la privada-privada, de la pública-pública, porque al final tú tienes dos tareas fundamentales: primero tener el diagnóstico claro de lo que quieres hacer y luego abordarlo. Pero no puedes esperar a que haya una mayor concienciación de la ciudadanía, o a que alguien abra los ojos en una administración supramunicipal", se quejó el alcalde.
En ese ámbito, el centro tecnológico Dinapsis de Hidraqua en Benidorm está desempeñando un papel esencial. Su directora, María Tuesta, explicó que desde hace cinco años trabajan en los indicadores de la ciudad de forma sistemática. Un modelo de éxito que ha sido replicado para poder contar con una red de estos centros por toda la Comunidad.
Conocer los indicadores "nos permite abordar retos de transformación digital y de salud ambiental de las ciudades. No nos focalizamos solamente como empresa gestora del agua sino que diagnosticamos la salud medioambiental de una ciudad con todo tipo de proyectos: calidad del aire, temperatura del suelo, para poder tomar medidas con datos para paliar los efectos del cambio climático", explicó Tuesta.
De Dinapsis han salido planes de emergencias y de inundaciones. También proyectos de infraestructuras verdes que permiten poder mitigar los efectos del cambio climático. Pero también, ya se está trabajando con diversos hoteles para hacer el estudio de la huella hídrica, que nos permite conocer su consumo de agua dulce y el agua que contaminan.
Innovación "abierta"
El director del Centro de Inteligencia Artificial (Diputación de Alicante-UA-UHM), Manuel Palomar, incidió en el tema de la recogida de datos: "Lo primero es tener conocimiento del cambio climático para tomar decisiones, y esto es obtener datos y más datos, y a partir de ahí tomar decisiones aplicando la tecnología y la inteligencia artificial".
A partir de ahí es cuando sirve la tecnología para la adaptación al cambio climático. "En el Centro de Inteligencia Artificial estamos trabajando en este momento en la eficiencia energética de los servicios públicos en la provincia de Alicante. Para disponer al menos de una hoja de ruta. Ahora hay tal cantidad de datos que necesitamos de la inteligencia artificial para ayudarnos a la toma de decisiones", aseguró Palomar.
"Los datos son la base de la cuarta revolución, es incuestionable. Ahora mismo la gran batalla que se está jugando es quién va a tener en el futuro el mejor extractor, transformador y almacenador de datos. Y cuando ves los grandes repositorios de datos abiertos, no están los de las grandes empresas. La innovación sólo puede entenderse de forma abierta", concluyó Palomar.
También desde el ámbito de la innovación, el director de Distrito Digital de la Comunidad Valenciana, Antonio Rodes, diagnostico algunos de los problemas económicos que sufre la región: "Tenemos un problema de productividad con un 5,6% debajo de la media, que nos impacta en bajos salarios ya su vez en menos renta per cápita, un 11,2% por debajo de la media nacional. Y esto empeora de norte a sur, así que la provincia de Alicante estamos peor todavía.
En este sentido, y pese a que "se están haciendo esfuerzos importantes de mejora" esta situación tiene dos razones fundamentales. Por lo que citó "la excesiva atomización de nuestro tejido productivo y la ausencia de digitalización".
"Los sectores más necesitados de esta digitalización son las industrias manufactureras, que hay muchísimo en el sur de la Comunidad Valenciana; el comercio; y la construcción". Para lo que propuso utilizar los fondos Next Generation que prevén una partida importante para la transformación digital, en concreto para pymes y microempresas, con el programa “kit digital”.
También, destacó la necesidad de generar algún tipo de prácticas de fabricación de innovación. Y es que uno de los tres programas de innovación abiertos por la Generalitat está gestionado por Hidraqua.
Por su parte, el secretario autonómico de Innovación y Transformación Digital en Generalitat Valenciana, Jordi Juan, incidió en que "la Comunidad Valenciana sigue estando poco digitalizada. Pero la situación está cambiando. Somos calificados por la UE como región moderadamente innovadora pero sí que hemos sido los que más hemos crecido".
"Nosotros, que hemos sido los que hemos liderado la estrategia de especialización inteligente, tenemos un análisis muy interesante que explica por qué somos la región europea que más crece, es porque hay cuatro ejes de especialización uno de los cuales es economía verde y otro de turismo que ya hablamos para que Benidorm lo liderara", señaló Juan.
Así, desde el punto de vista público Juan aseguró que "los municipios tienen que ser líderes en cuanto a políticas de innovación" con una línea de ayudas para financiar proyectos de innovación planes estratégicos de innovación. También trabajan con la FVMP en formación y con la Asociación Valenciana de Empresas de Energía trabajando en temas de mediciones. De este modo han podido sacar a la luz un ‘índice smart’ para que los municipios conozcan su grado de desarrollo.
"Es muy importante que en esta revolución tecnológica nadie se quede atrás", concluyó Juan, por lo que valoró la inversión de 15 millones de euros para programas de formación hasta 2023 y el bono digital de conectividad para las familias, hasta 2023. "Vamos a tramitar 13.000 bonos con un montante de 3 millones de euros y una ayuda por hogar de 240 euros al año".
Por último, Cristina Baixauli, directora de Transformación de Hidraqua, cerró el coloquio. "Es la última década, no tenemos más, ya tenemos que correr. Hay que luchar contra el cambio pero el cambio ya está aquí y hay que adaptarse, no hay más", alertó.
En este sentido, hizo especial hincapié en la campaña de conciención que la compañía ha lanzado ya para todo este ejercicio: "Climas para el cambio". Así como otros programas educativos adaptados por edades que introduzcan en la vida cotidiana de los más pequeños "los conceptos de cambio climático y el de desarrollo sostenible".
"Nosotros necesitamos que las Administraciones públicas sean agentes dinamizadores para la colaboración público-privada. Contra el cambio climático está la transformación digital y la innovación, pero si tiene que llevar un apellido la innovación es que tiene que ser abierta. Las individualidades no caben. Necesitas que la tecnología aporte realmente valor cuando la integras dentro de una solución que responde aun reto pero poniendo en el centro a la ciudadanía", afirmó Baixauli.
Y añadió: "Pedimos a las Administraciones públicas que nos ayuden e impulsen. En la parte de inversión son muy importantes las ayudas. A nivel local pedimos a los ayuntamientos, que tienen mecanismos para hacer que empresas como nosotros hagamos inversiones que realmente tengan un impacto. En 2022, tenemos un plan de inversión de 47 millones de euros".
Y respecto a la recogida y tratamiento de datos, Baixauli añadió: "Hidraqua no es una empresa nativa digital, venimos de procesos muy manuales. Somos tan grandes, tenemos tantos datos, estamos trabajando en ello, en convertirnos en una empresa datadriver, pero nos cuesta mucho compartir datos".
"Necesitamos trabajar mucho porque tenemos modelos de datos muy distribuidos, estamos buscando la parte de gobernanza del dato. ¿Puedo saber qué va a pasar? ¿Podemos ir a ese mundo de un gemelo digital en el que pueda replicar mi realidad y dibujar diferentes escenarios para reconducir las cosas cuando me estén pasando?", dejó la pregunta en el aire.