La ciudad de Alicante tiene el tercer salario medio más bajo de España de todos los grandes municipios, 1.636,40 euros, solo superado por Badajoz (1.590,70) y Cáceres (1.621,30), según un informe publicado este martes por Hellosafe, la plataforma especialista en comparar productos financieros.
La diferencia es que la primera, capital de la quinta provincia de España en población y aportación al PIB, tiene un coste de vida muchísimo más elevado que las otras dos: los alicantinos se gastan el 78 % de lo que cobran en lo que se denomina "coste de la vida", es decir, en productos básicos para subsistir. En el caso de Badajoz es del 56 % y en Cáceres del 47 %.
En su informe HelloSafe explica que el coste de vida "contempla los gastos mensuales de una persona promedio y su alquiler en dicha provincia". "Estos datos comprenden estimaciones de Numbeo sobre gastos mensuales en alimentos, transporte, servicios básicos del hogar" y también algo de "deporte y entretenimiento".
En el dato se incluye el coste promedio de un piso de una y dos habitaciones en el centro y en los alrededores de la ciudad, según publicaciones de Idealista hasta el 5 de mayo del 2023.
El coste de la vida de Alicante es además el quinto más alto de un ránking nacional que encabezan Barcelona, Málaga, Baleares y Las Palmas, con un 82, 81, 80 y 78 % del sueldo destinado a gastos de la vida. En este último caso, aunque es el mismo porcentaje que Alicante, está por encima al tener un sueldo promedio más alto (1.726,7 euros).
El mismo informe indica que Valencia está justo debajo de Alicante en la tabla (puesto 6), con un 75 % del salario destinado al coste de la vida, aunque se cobra mucho más (1.820 euros). La media nacional está en 1.936,6 euros y un 69 % de los salarios destinados a gastos básicos.
HelloSafe explica que el coste de vida promedio en España de 656,60 € mensuales, lo que representa el 61% del salario mínimo interprofesional publicado para 2023 en el Boletín Oficial del Estado, de 1.080 euros.
También destacan que en seis países europeos los gastos mensuales (sin incluir la vivienda) superan el salario mínimo, como es el caso de Albania, Bulgaria, Letonia, Serbia, Estonia y Montenegro; otros, como Italia, Suiza, Noruega y otros, no tienen un salario mínimo mensual fijo. Cuentan con reglas diferentes y establecen un pago mínimo por hora o varían según la región del país.