Elche cuenta con pocos lugares tan emblemáticos como su basílica. Sin un emplazamiento donde albergar a su anhelada Dama, pieza principal del Museo Arqueológico Nacional de Madrid de donde la ciudad insiste en lograr su cesión, el del templo de Santa María es de los monumentos más visitados por los turistas y de los más queridos por los ilicitanos.
Esto se explica, en parte, porque aquí se representa cada año, y desde hace siglos, el Misteri d’Elx, drama sacro-lírico declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Pero también porque este edificio, situado en la plaza del Congreso Eucarístico, constituye un símbolo para la ciudad que traspasa el significado católico.
Su historia se remonta a 1784, año en el que fue inaugurada la Arciprestal e Insigne Basílica menor de Santa María, como también es conocida, de estilo barroco italianizante en su fachada principal, con un interior más bien neoclásico.
Atrás quedaron 112 años de construcción, un periodo largo incluso para la época, en el que se sucedieron hasta tres arquitectos: Francisco Verde, Pedro Quintana y Ferrán Fouquet.
Imagen de la basílica, en la actualidad.
Tres templos previos
También tres han sido los templos que se han sucedido en este emplazamiento. Comenzó, en la Edad Media, con una mezquita que amparaba uno de los extremos de la Vila murada hasta que Jaume I El Conquistador, Rey de la Corona de Aragón, acabó con la simbología musulmana con su entrada en la ciudad en 1265.
Entonces pasó a ser una iglesia cristiana bajo la advocación de Santa María. Esto último no cambió, pero su estructura sí, que aguantó hasta 1334, cuando fue demolida ante el riesgo de derrumbe.
Sin embargo, se dispone de poca información sobre el siguiente templo levantado en este lugar. Se sabe, por ejemplo, que existió hasta la simbólica fecha de 1492 y que fue de estilo gótico.
Más tarde, y de corte renacentista, se levantaría la tercera de las iglesias de Santa María entre 1492 y 1566, cuando fue bendecida. ¿Cómo era?: "muy grande, de una nave y tan alta que causa espanto y asombro a los forasteros. Parece que Nuestra Señora le sustenta, para que allí se celebre su muerte y asunción a los cielos. No se halla en la cristiandad otra tal fábrica como esta iglesia", relataba entonces Cristóbal Sanz, una especie de cronista de la época.
Guerra Civil
A principios de siglo, desde 1902 hasta 1905, la iglesia de Santa María tuvo que cerrarse a los fieles para su reparación después de que una serie de terremotos décadas atrás, y algunos defectos en la construcción, hicieran saltar las alarmas.
Andamios en el interior de la basílica para su restauración tras los incendios de 1936.
Aunque si hay una fecha que ha quedado para los anales es la del 20 de febrero de 1936 cuando, en el contexto prebélico de la Guerra Civil, fue asaltada, robados sus elementos, incluida la imagen de la Patrona de Elche, la Virgen de la Asunción y quemada parcialmente por facciones del bando republicano.
Otra fecha clave es la distinción del título de Basílica Menor concedido por el papa Pio XII en reconocimiento a su contribución en la defensa y propagación de la Asunción de María a los cielos.
Desde entonces se han sucedido las restauraciones para apuntalar cornisas o restaurar capillas. En la actualidad están pendientes varias actuaciones tras la caída de cascotes a principios de 2021, que relevan que el paso del tiempo está haciendo mella en el templo.
Bodas de renombre
La Basílica de Santa María es la iglesia elegida por muchos ilicitanos y vecinos de otroas localidades para contraer matrinonio. Es, de hecho, el lugar predilecto año tras año, como revelan las colas que se forman de prometidos quienes, desde altas horas de la madrugada de cada mes de enero, se agolpan para poder elegir fecha de la boda.
Pero si hay una boda que atrajo la mirada de curiosos fue la de el actual presidente del Partido Popular, Pablo Casado, quien dio el 'sí quiero' con la ilicitana Isabel Torres Orts el pasado 20 de junio de 2009.
La expectación no solo vino por ver juntos al presidente de Nuevas Generaciones con la hija de los destacados propietarios del grupo Huerto del Cura, sino también por poder fotografiarse a la salida del enlace con los pesos pesados del PP de entonces, entre los que estaba José María Aznar, su esposa Ana Botella y Esperanza Aguirre.