El Ayuntamiento de Elche, a través de la concejalía de Medio Ambiente, sigue trabajando en el estudio para la naturalización y restauración ambiental del río Vinalopó que atraviesa la ciudad alicantina.
La regidora del área, Esther Díez, junto al subdirector general de Protección del Agua, Javier Sánchez, y el coordinador de proyectos de Ecologistas en Acción, Santiago Martín, ha visitado el río Manzanares de Madrid, uno de los lugares dondem desde el año 2016, se está llevando a cabo este proceso de renaturalización.
Tal y como ha señalado la edil “este proyecto ha permitido recuperar numerosas especies de flora y fauna autóctonas, embellecer el paisaje y contribuir al bienestar de los vecinos y vecinas en pleno casco urbano de Madrid”.
Además, Diez ha destacado que a través de esta iniciativa, se ha conseguido un incalculable valor ambiental en ese tramo urbano del río, que discurre a través de ocho kilómetros por la ciudad. “Hay que tener en cuenta que con la naturalización del Manzanares se ha conseguido la conexión de diversos enclaves de alto valor ambiental; lo mismo que conseguiríamos con la actuación en el río Vinalopó, uno de los principales corredores ecológicos del municipio y que conecta el Pantano con el Parque Natural del Hondo”.
Según la concejala de Compromís, “la vista se enmarca dentro de la convocatoria de la Fundación Biodiversidad para la naturalización de ríos en el conjunto de España y se está estudiando la viabilidad de aplicar este modelo en el río Vinalopó con el objetivo de recuperar la función social y ambiental de uno de nuestros principales corredores ecológicos”.
¿Cómo ha sido en Madrid?
La Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), a través de su sección Red de Gobiernos Locales + Biodiversidad, reconocio a Madrid por su candidatura ‘Renaturalización del río Manzanares en el tramo urbano de Madrid’ con el primer puesto en la categoría ‘Medio Hídrico’ de los premios ‘Buenas prácticas locales por la biodiversidad’.
El Manzanares abrió sus presas en 2016, recuperando pronto los caudales y atrayendo a la flora y fauna autóctona, lo que ha permitido que cohabiten más de 50 especies de aves y el barbo, especie piscícola autóctona. En todo este tiempo, el municipio ha seguido apostando por introducir peces autóctono como la colmilleja o el cacho, teniendo también que eliminar, en ocasiones, a las alóctonas.
Cuando la naturaleza se ha abierto camino con el nuevo régimen hidrológico del río, las arenas han sedimentado y forman numerosas islas en el cauce y barras laterales de tierra en sus márgenes, ha informado el consistorio. Estas islas son colonizadas por especies de flora autóctona que hay que mantener y controlar para asegurar la libre circulación del caudal de agua, preservando de esta forma la seguridad frente a posibles crecidas.
A finales de 2020 se realizó un levantamiento fotogramétrico con toma de ortofotos aéreas mediante vuelo con dron. A lo largo del próximo mes de abril se realizará otro vuelo para constatar la evolución de las islas en el tramo urbano, lo que permitirá una mejor gestión, minimizando los riesgos hidrológicos.