¿A qué penas se enfrentan los cuatro menores yihadistas de Elche?: "El objetivo será la reeducación"
- Los adolescentes, de entre 14 y 17 años, fueron detenidos el pasado 19 de diciembre por presuntamente planear un atentado en la ciudad.
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La detención de cuatro adolescentes yihadistas en Elche el pasado 19 de diciembre por planear un atentado en las fechas próximas a Navidad fue la última detención de jóvenes radicales en España en 2024, una tendencia cada vez más al alza. Pero ¿qué castigos tienen los menores terroristas? ¿Qué futuro les espera? ¿Cuándo podrán reintegrarse en la sociedad? Un especialista responde a estos interrogantes.
En el pasado año, 81 personas fueron detenidas por estos hechos, superando las 78 de 2023, que registraba el mayor número desde los atentados de 2004 en Madrid. En Alicante han sido arrestados siete, siendo cuatro de ellos los menores de Elche.
Tenían entre 14 y 17 años, y la Policía Nacional sospecha que tenían intención de atentar contra la Basílica de Santa María tras requisar un dibujo a uno de ellos en el que se mostraba lo que parecía ser una cúpula o torre. Ahora se encuentran detenidos en el centro de menores Teresa de Calcuta de la Comunidad de Madrid mientras se determina su culpabilidad, lo que marcará su futuro.
Fuentes del Ilustre Colegio Provincial de la Abogacía de Alicante (ICALI) explican a este diario que se les aplicará la ley del menor, con independencia de que el delito que se les impute sea el de terrorismo, uno de los más graves.
Entre los delincuentes que aún no han cumplido la mayoría de edad hay que diferenciar entre dos franjas, ya que tienen diferente regulación. Por las infracciones de los menores de 14 años responden civilmente los padres o tutores, mientras que de 14 a 18 años los adolescentes sí tienen responsabilidad penal, es decir, responden por sus actos y pueden ser privados de su libertad.
Los cuatro yihadistas no tendrán penas, sino que se les aplicarán medidas, como se les denomina. Se trata de castigos de menor duración que los que conllevarían los mismos delitos en adultos y con un enfoque en la reeducación y no en el carácter sancionador de los mayores de 18.
Como medida cautelar, el centro madrileño los acogerá durante un máximo de dos años, el plazo máximo para realizar el juicio, "que siempre suele realizarse en plazo en el caso de menores", indican.
Una vez juzgados y sentenciados, las medidas tendrán que basarse en dos pilares: la franja de edad del menor y el tipo de delito que se ha cometido.
El terrorismo está considerado como delito de "extrema gravedad", por lo que podrían enfrentarse a las medidas más severas que, aunque persiguen la reeducación, no les eximen de responsabilidad penal.
"Hay que determinar qué delitos establecidos desde el artículo 571 al 580 del Código Penal, que son los relativos a terrorismo y pertenencia a organización o grupo terrorista, han cometido", apuntan fuentes del ICALI.
Internamiento
La medida más grave para un menor es el régimen cerrado, que para los delincuentes de entre 14 y 15 años podrá ser de uno a cinco años más una libertad vigilada de hasta tres años.
Mientras que si el menor tiene 16 o 17 años, la medida de internamiento en régimen cerrado puede ser de uno hasta ocho años más una libertad vigilada de hasta cinco años. "Además, se les puede inhabilitar entre cuatro y 15 años", añaden.
Las fuentes consultadas explican que la libertad vigilada tiene un contenido educativo y acarrea la obligación de citarse con un trabajador social, además de no cometer más delitos.
Cuando cumplan la mayoría de edad, pueden pasar a un centro penitenciario o cumplir el resto del tiempo en el centro de menores, ya que "en los menores, cada caso se estudia por separado".
Así, seguramente cumplan su castigo en Alicante, ya que la norma general trata de que se cumpla en un centro de menores lo más cerca posible de su domicilio para facilitar las visitas y los permisos.