"En esta ruta el viajero se transforma en una gota de lluvia que cae sobre las montañas", esta es la comparación que realiza la Diputación de Alicante en su ruta del cielo al mar. Este recorrido, de 37,6 kilómetros de distancia, tiene gran valor paisajístico, y discurre por diferentes zonas de interés.

Entre ellas, destaca: el acuífero de Cocoll, el mirador de Tàrbena, las cumbres calcáreas de las sierras de Ferrer y Bernia al este, las de Aixortá al suroeste, y además las de Aitana al sur, con los picos de Ponox y el Puig Campana.

Pero para disfrutar de estas increíbles vistas no hace falta hacer la ruta entera porque hay cinco trayectos a puntos adyacentes, adaptados a los distintos viajeros. El primer punto de partida lo encontramos en la dolina de La Llacuna de Castell de Castells, con un recorrido de 3,3 km, y 3 horas de duración.

El segundo punto adyacente es la fuente de los chorros de Bolulla, un corto recorrido que se puede hacer tanto en coche como a pie, y cuya duración es de 20 minutos. En tercer lugar, las fuentes del Algar, con 1,4 kilómetros en coche. La vista a este recinto es a pie y con entrada de pago. El cuarto punto adyacente es el barranco de Polop, de 1,5 horas. Por último, también se propone iniciar la ruta por la desembocadura del río Algar, con 1 km de trayecto, pero hay que hacer un trocito en coche.

La Diputación de Alicante destaca tres lugares hidrogeológicos que merece la pena visitar. Algunos de estos enclaves forman parte de los trayectos a puntos adyacentes.

La Llacuna de Castell de Castells

Una depresión circular situada entre la Sierra de la Xortà y la Sierra del Carrascal de Parcent. La dolina de la Llacuna se desarrolla en rocas carbonatadas, que por su ubicación, morfología y dimensiones son un claro ejemplo de "dolina tipo". El organismo provincial destaca así el carácter didáctico de la ruta. Este lugar está a unos 750 metros de distancia de la cumbre del 'Cloret' o la sierra del 'Forat Negre'.

El humedal de la desembocadura del río Algar

Este lugar, situado al norte de la ciudad de Altea, está considerado por la Comunidad Valenciana como zona húmeda protegida. El humedal de la desembocadura del Algar concentra tanto agua dulce como agua salada, lo que propicia el hábitat de diferentes especies.

Las Fuentes del Algar

Las Fuentes del Algar, una de las zonas con más afluencia turística por su enorme belleza paisajística. Se trata de un conjunto de cascadas y pequeños manantiales situados a escasos 3 kilómetros del casco urbano de la localidad de Callosa de Ensarriá. Desde 2002, están incluidas en el Catálogo de Zonas Húmedas de la Comunidad Valenciana. El lugar cuenta con una zona habilitada para el baño y un circuito señalizado para visitantes.

Del cielo al mar es una ruta diseñada tanto para el ocio y entretenimiento de los viajeros como para el aprendizaje de los mismos gracietas gracias al gran valor paisajístico del terreno. La Diputación dispone de información más detallada sobre esta y otras rutas en su página web.