Condenado a cárcel por asaltar a dos menores a las que forzó para chuparles los pies en Alicante
El joven, de 31 años, ha sido sentenciado a cinco años -de los 9 reclamados- por agresión sexual y abuso en plena calle; con una llegó a masturbarse.
16 diciembre, 2021 18:23Noticias relacionadas
La Fiscalía solicitaba para el acusado 9 años de prisión, que finalmente han quedado en 5, por lo que igualmente acabará entre rejas. La Audiencia de Alicante ha condenado al joven de 31 años que asaltó a dos menores de edad en 2018 para chuparles los pies.
Pese a que el agresor solicitaba la libre absolución, al alegar que únicamente había mantenido una conversación con las dos chicas en plena calle, la Justicia ha quedado acreditado que es el autor de un delito de agresión sexual cometido sobre la menor de 14 años y otro de abuso, a una chica de 17 años, a las que forzó para que le dejasen que les chupara los pies.
El tribunal de la Sección Segunda que juzgó los hechos ha impuesto al acusado la pena de cinco años de prisión por el primero de los delitos, por el que el condenado se masturbaba mientras chupaba los pies de la menor, así como otra pena adicional de 18 meses de multa por el segundo, en el que forzó a la menor para chuparle uno de los pies.
El primero de los delitos se produjo el 3 de septiembre de 2018, cuando la primera de las víctimas, una chica de 14 años, se encontraba caminando por la calle en dirección a su domicilio, momento en el que el acusado, que había comenzado a seguirla, la abordó y comenzó a piropearla y a formularle preguntas como cuál era su nombre o si tenía novio.
Según la sentencia, el procesado le dijo que tenía los pies "bonitos" y le preguntó si le dejaba que los tocase; la menor se negó lo que provocó que el acusado reaccionase "con intención de satisfacer su deseo sexual", la cogió por los brazos y "la empujó contra la persiana metálica de un almacén para que no pudiera moverse", mientras comenzaba a tocarle la pierna.
Mientras la menor comenzó a gritar para pedirle que la soltase, el procesado le pidió que le dejase chuparle el pie con la amenaza de hacerle "algo peor" y le amenazó con "violarla" si no permanecía quieta, un momento en el que el acusado comenzó a chuparle el pie "pudiendo ver la menor cómo a la vez, cogiendo su pene dentro de un pantalón deportivo, con una mano se masturbaba".
El segundo delito
El segundo de los delitos había tenido lugar con anterioridad, en torno a las 22:30 horas del 10 de junio de 2018, cuando el acusado siguió a una joven de 17 años que se encontraba esperando en el portal de la casa de una amiga.
Allí, la abordó, y después de iniciar una conversación con ella, le dijo que le gustaban sus pies y le pidió que se quitase el zapato para verlo mejor. La menor se negó, pero el acusado consiguió sujetarla y retirarle el calzado para introducirse el pie en la boca y comenzar a chuparlo, "hasta que la menor se pudo soltar y salir corriendo".
Durante la vista, el acusado negó los hechos y solo admitió que conversó con las dos chicas; no obstante, el tribunal considera que las versiones de las dos menores poseen toda credibilidad por la persistencia y la claridad de sus relatos y no existir ningún ánimo espurio en perjudicar al acusado.
Así, considera que el comportamiento del procesado debe ser castigado como un delito de abuso sexual y de agresión sexual al concluir que se trata de "unos contactos corporales inconsentidos" que tienen "una significación sexual e implican un ataque a la libertad sexual de las víctimas".
El tribunal apunta que la conducta del acusado, por la que abordó a dos menores que se encontraban por la noche solas en la calle "para conseguir introducir sus pies en su boca y chupar los mismos contra su voluntad, resultan actos de contacto corporal de inequívoca naturaleza sexual" y resultan "de una parafilia fetichista que obtiene excitación y placer sexual en relación con los pies".