Alicante

En España, el cáncer es también una de las principales causas de morbi-mortalidad. Según el último informe de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) los más frecuentemente diagnosticados en 2021 fueron los de colon y recto (43.581 nuevos casos), seguidos de los de próstata (35.764), por encima de los de mama (33.375) o pulmón (29.549).

Las nuevas realidades sociales y el envejecimiento de la población imponen la necesidad de un diagnóstico preciso del cáncer de próstata. En este sentido, habitualmente, ante la sospecha de cáncer de próstata (CaP), ya sea por una elevación del antígeno específico de próstata (PSA) o por un tacto rectal alterado, se realiza una biopsia transrectal ecoguiada de 12 cilindros.

Según explica la doctora Araceli Amorós, uróloga de Quirónsalud Alicante y Elche, “esta toma de muestra, aunque sistemática, se realiza de forma aleatoria, sin dirigirse a una lesión específica, debido a la poca especificidad que presenta la ecografía. Esto ocasiona que un gran porcentaje de las biopsias resulten negativas para cáncer, así como, un sobrediagnóstico de CaP de bajo grado”.

Cartel explicativo de la técnica de biopsia fusión.

El desarrollo y el aumento en el uso de la resonancia magnética multiparamétrica de la próstata (RMmp) permite delimitar áreas de sospecha de cáncer dentro de la glándula, y mejorar la precisión, afinando el diagnóstico hacía los tumores de mayor agresividad.

"El hecho de solicitar una RMmp en pacientes sin biopsia previa o en pacientes con biopsia negativa con persistencia de sospeche clínica de cáncer, nos ayuda a dirigir la toma de las muestras de la biopsia a áreas que presuman mayor probabilidad de malignidad", añade la doctora Amorós.

En la actualidad la clasificación de PI-RADS V2, ha ayudado a hacer uniformes los informes de RMmp mejorando su especificidad. Ante una lesión sospechosa para CaP según PI-RADS V2, es posible guiar la toma de muestra mediante la utilización de softwares, logrando una fusión de las imágenes con el ultrasonido en tiempo real.

Las guías clínicas actuales aconsejan mantener la biopsia por sextantes con un máximo de 12 cilindros, acompañada de biopsias dirigidas a las zonas sospechosas según PI-RADS V2. De modo que cuando hablamos de biopsia fusión eco-RM, a día de hoy nos referimos al sumatorio de 12 cilindros aleatorios más los dirigidos, según esta técnica, a las lesiones diana. Gracias a la RMmp disminuimos le número de biopsias y gracias a la biopsia fusión aumentamos el diagnóstico de alto riesgo. Por tanto, disminuimos el riesgo de sobretratamiento en CaP.

¿Qué es la biopsia por fusión?

La biopsia fusión es la técnica que permite dirigir nuestra biopsia a las lesiones dianas (sospechosas de cáncer de próstata, gracias a la convergencia de las imágenes de RM y ecografía a tiempo real). Concretamente, a la fusión de imágenes de una resonancia magnética multiparamétrica (RMmp) de próstata realizada previamente a la intervención y a la ecografía que realizamos en el mismo momento de la biopsia para orientar la aguja de punción.

La doctora Amorós señala que esta fusión se consigue gracias a un software que permite marcar las zonas sospechosa que se han diagnosticado mediante la RMmp sobre la ecografía a tiempo real. Podríamos decir que nos ayudan a navegar a través de la próstata. De este modo el urólogo será mucho más preciso ya que permite planificar e individualizar la técnica.

Por su parte, el doctor Juan José Monserrat, jefe de Urología de Quirónsalud Valencia, concreta que esta "técnica diagnóstica de alta precisión que combina la imagen de la resonancia multiparamétrica de la próstata con la imagen de la ecografía transrectal que se obtiene en el momento de la biopsia. De esta forma, dirigimos la toma de muestras directamente a las zonas concretas que la resonancia que identificado como sospechosas".

La biopsia fusión se realiza ante la sospecha de un cáncer de próstata. Siempre debemos disponer de una resonancia magnética multiparamétrica (RMmp) de próstata previa, con unas secuencias específicas que permitan la fusión de las imágenes con la ecografía. Y el doctor Monserrat especifica que "está especialmente aconsejada en lesiones de difícil acceso, cuando persiste sospecha clínica de cáncer de próstata tras una biopsia negativa para tumor, y para plantear vigilancia de tumores de bajo riesgo o terapias focales".

A los 50 años

La doctora Amorós recuerda que gran mayoría de los pacientes no presenta ningún síntoma, por eso es importante que los hombres a partir de los 50 años cuiden su salud prostática y acudan a realizar una revisión con su uróloga de confianza.

“Es prioritario y se adelanta la edad a los 40 años en los casos en lo que hay antecedentes familiares de cáncer de próstata. En ocasiones hay pacientes que debutan con molestias o sangrado al orinar o al eyacular, pero la gran mayoría de casos son silentes”, señala la doctora.

Los urólogos y urólogas son quienes mejor pueden diagnosticar esta enfermedad. Los especialistas son quienes tienen las herramientas para establecer qué pacientes deben ser estudiados son el tacto rectal y fundamentalmente la determinación de PSA en sangre.

La propia resonancia prostática ajustará aún más la indicación de la biopsia, descartando su necesidad en un importante número de casos. También la determinación de biomarcadores en orina o en sangre ayudan a establecer una indicación más precisa de biopsia prostática.

Ventajas frente a las técnicas tradicionales

El doctor Monserrat destaca que la biopsia prostática "clásica" es una biopsia aleatoria, en la que el realizador distribuye las líneas de punción en ambos lóbulos prostáticos, pero sin dirigirlas a ninguna zona concreta. Esto conlleva un importante porcentaje de falsos resultados negativos y a la necesidad de aumentar considerablemente el número de punciones, con el consiguiente aumento de complicaciones.

"La biopsia por fusión incorpora la información aportada por la resonancia de próstata de altísimo valor diagnóstico, al momento de la biopsia guiada por ecografía transrectal. De esta forma se tiene la certeza de obtener tejido de las zonas de interés, sin necesidad de aumentar el número de punciones", explica el urólogo.

La doctora Amorós también recuerda que para acceder a cada una de las etapas del tratamiento es "un requisito previo disponer de una RMmp que identifique imágenes sospechosas de tumor prostático. Estas imágenes son tratadas por nuestra radióloga para que en el momento de la biopsia se puedan fusionar con la ecografía".

El paciente realizará una preparación preoperatoria con enema de limpieza e higiene de la zona, para minimizar riesgo de infección. Luego, el urólogo realizará una ecografía transrectal (a través del ano). En esta ecografía fusionaremos a tiempo real las imágenes.

Se tomará muestras de forma sistemática para tener un mapa de la próstata y gracias a la técnica de fusión se tomarán cilindros específicos de las zonas sospechosas para cáncer. Todas estas muestras se remitirán al laboratorio de anatomía patológica. Así, el paciente podrá volver a casa de manera casi inmediata.

En un plazo aproximado de 10 días se dispondrá del diagnóstico. Para todo ello tan sólo se necesitará anestesia local administrada por el propio urólogo en el mismo momento de la biopsia, con una sedación para mayor comfort.

Puedes solicitar información acerca de la biopsia por fusión en los centros Quirónsalud Alicante y Valencia.

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