Zaragoza

La puntualidad del bus es un asunto que siempre genera debate. Especialmente los meses de verano, en los que el calor y los ajustes de las frecuencias por la caída de la demanda hacen que las esperas se lleven peor en las paradas. Cada cual tiene su opinión al respecto, pero ¿qué dicen los datos? ¿Cuáles son las líneas más puntuales? ¿Y las más impuntuales?

Las estadísticas de la semana 33, del 12 al 18 de agosto, revelan que, de media, el índice de puntualidad (IP) -encargado de medir la relación entre el número de expediciones puntuales frente al total de viajes programados- se situó en el 90,44%.

El porcentaje está ligeramente por encima del 90% que se exige a Avanza. El pliego de condiciones establece 'sanciones' cuando no se alcanza esta cifra. En este caso, al encontrarse por encima del valor objetivo, los resultados de esta semana no serían objeto de penalización y, por tanto, no tendrían repercusión económica para la contrata. No obstante, no todas las líneas llegaron al objetivo del 90%.

Entre las que destacaron por su puntualidad, la 56 (Valdespartera-Tranvía), la N5 (Plaza Aragón-Las Fuentes-San José-La Paz-Parque Venecia) y la N6 (Paseo Pamplona-Plaza Roma-Vía Hispanidad-La Cartuja) obtuvieron las mejores cifras, con un índice de puntualidad del 100%, lo que significa que todas las expediciones programadas llegaron a tiempo.

Ha de tenerse en cuenta que, esa semana, la circulación estaba todavía marcada por las obras en el Coso, que obligaron a desviar varias líneas. Otras que también se comportaron de manera destacada fueron la 43 (Juslibol-Actur Rey Fernando), con un índice de puntualidad del 99,75% y la C1, con un 99,05%.

Las líneas, al detalle Ayuntamiento de Zaragoza

Por contra, algunas líneas presentaron índices de puntualidad mucho más bajos. La 33 (Pinares de Venecia-Delicias) es la más destacada en este sentido, con apenas un 61,81%, lo que indica que casi cuatro de cada diez autobuses no llegaron a tiempo. Esta línea es la que peor desempeño tuvo durante la semana.

Tampoco llegaron al 90% exigido la 32 (Santa Isabel-Bombarda), con un 75,40%, y varias líneas nocturnas, como la N7 (Plaza Aragón-Arrabal-San Gregorio-Peñaflor) y la N4 (Paseo Pamplona-Romareda-Rosales del Canal-Arcosur), con un índice del 62,50% y 73,91% respectivamente. Este bajo rendimiento en los búhos es especialmente llamativo, ya que, en muchos casos, representan la única alternativa para quienes quieren volver a casa una vez terminado el servicio del tranvía.

Desde el Ayuntamiento destacan que estas cifras son provisionales y están sujetas a revisión, como indica el informe de la empresa concesionaria. Además, se señala que obras como las del Coso han complicando el cálculo preciso de la puntualidad en ciertos casos.

Evolución del índice de puntualidad E. E.

Los nuevos cuadros de marcha que se han ido implantando de forma progresiva para ajustar los tiempos de recorrido a la nueva realidad de la ciudad, con más vías pacificadas y un mayor protagonismo de otros agentes como los patinetes eléctricos, han permitido mejorar los porcentajes, aunque hay líneas que siguen estando lejos de los objetivos. De hecho, la evolución de los últimos años muestra no pocos meses en los que el servicio no llega a ese 90%. Todo esto se abordará, previsiblemente, en la reordenación del bus, en la que se lleva meses trabajando desde el área de Medio Ambiente y Movilidad.