Casademont Zaragoza se estrella de nuevo contra su bestia negra en la final de la Supercopa

Si el sábado salió cara, este domingo ha salido cruz. Casademont Zaragoza no ha podido competir contra el todopoderoso Valencia Basket, que este año vuelve a aspirar a ganarlo todo, y que seguirá siendo la bestia negra del cuadro rojillo. Las valencianas han sido superiores a las aragonesas desde el primer minuto hasta el último en Alcantarilla (Murcia), sin dar ninguna opción a ilusionarse, o a remontar, a las de Carlos Cantero. Al descanso, la desventaja ya era de 20 puntos. Finalmente, Casademont Zaragoza ha caído ante Valencia Basket en la final de la Supercopa LF Endesa por 84 a 60 y no puede sumar el segundo título de su historia a su palmarés, ni su primera Supercopa.

Tras derrotar este sábado por 60-65 a Perfumerías Avenida en un duelo muy igualado y donde las zaragozanas dejaron sensaciones fantásticas, en la final de la Supercopa femenina les tocaba verse las caras con su eterna bestia negra, un Valencia que derrotó en semifinales 75-61 al Jairis.

De esta forma, se reeditaba la final de la Copa de la Reina 2024, también el enfrentamiento en las semifinales de los 'playoffs'. Esta vez el escenario era la final de la Supercopa de España, en la que residía el deseo de conseguir un resultado diferente a los anteriores.

En el pabellón Fausto Vicent, Casademont Zaragoza comenzaba con su esperado quinteto formado por Mariona Ortiz, Helena Pueyo, Tanaya Atkinson, Ellen Nystrom y Keisha Gatling.

La gran final arrancaba con posesión y canasta para el conjunto taronja. En el siguiente ataque empataba Gatling, que se encargaba de sumar los primeros puntos para Casademont Zaragoza. De hecho, los seis primeros eran suyos cuando la diferencia se iba ya al 11-6. Y es que desde el principio Valencia Basket demostraba su poderío y superioridad, anotando fácil y con una defensa fuerte que impedía absolutamente todo a las aragonesas. Declaración de intenciones.

Las de Rubén Burgos estaban cómodas y Casademont Zaragoza no terminaba de entrar en el partido. Con el 16-6 Carlos Cantero se veía obligado a pedir el tiempo muerto que servía para que Brcaninovic anotara un triple nada más salir a la pista murciana. Sin embargo, cada ataque de las taronja era un puñal y la distancia se ampliaba hasta el 20-9 al final del primer cuarto.

Todo lo bueno del sábado, no lo estaba pudiendo demostrar el cuadro maño este domingo, necesitando muchos cambios para poder pelear por el título.

No obstante, en el segundo acto no cambiaban las sensaciones. La defensa de Valencia Basket cerraba las transiciones y los tiros de Casademont Zaragoza y sus ofensivas fluían de la mano de Vitola, una gran Mavunga o Torrens. Laia Flores era la única que podía anotar (un triple) antes de que Cantero volviera a parar el partido con un resultado de 29-12.

La reacción de Casademont Zaragoza tardaría en producirse, pese a las rotaciones en el parquet. En la reanudación, Nerea Hermosa sumaba un más dos, pero con dos tiros libres de Alba Torrens la distancia no se reducía. Las rojillas veían como el partido se complicaba demasiado pronto y las imprecisiones pasaban factura.

Con una desventaja de 20 puntos (34-14), aparecía la joven Gervasini con valentía para liderar el inicio de la reacción. Entre ella y Gatling el marcador se establecía en 37-23, provocando el tiempo muerto de Rubén Burgos.

Las suyas respondían con un triplazo, Nystrom anotaba dos puntos desde el tiro libre, pero Leti Romero no perdonaba y con ocho segundos para el descanso, la posesión volvía para Valencia. Fingall sumaba un más tres sobre la bocina para cerrar la primera parte 45-25, dejando las posibilidades mañas bajo mínimos.

La final se encontraba cuesta arriba en el ecuador. Todavía más complicada era la hazaña teniendo en cuenta la falta de participación de jugadoras como Helena Pueyo, Mariona Ortiz o Tanaya hasta el momento.

Partido decidido

Con la mentalidad de que los imposibles no entran en su vocabulario, afrontaba la segunda mitad Casademont Zaragoza. En esta buscaría no perderle la cara al partido y apurar sus opciones. Un 2+1 de Mariona Ortiz abría la segunda parte en Alcantarilla, y un 2+1 de Valencia Basket sería la continuación. Iagupova, haciendo de las suyas, ponía un gran triple (51-28), al cual le sucedía una bonita canasta de Gatling.

Nada cambiaba y las taronja encontraban las canastas fáciles. En ese instante, Mawuli cogía el mando de la anotación aragonesa con siete puntos consecutivos (57-37). Sin embargo, su rival no permitía que estas recortaran distancias, y la estrella ucraniana se apuntaba otro +3.

Helena Pueyo y Laia Flores lideraban el ataque con sus canastas que instauraban el 60-43. No obstante, un 2+1 de Valencia, con un rebote a su favor, originaba un buen cierre de cuarto para las valencianas, a pesar de la nueva canasta de Nerea Hermosa. El amplio 67-45 lucía en el marcador al final del tercer cuarto.

22 abajo y 10 minutos por delante... El partido podía darse por decidido, aunque las naranjas no se relajarían y el encuentro se colocaba en rentas máximas.

Por su parte, Casademont Zaragoza conseguía su primera canasta del último cuarto cuando ya se habían disputado casi 4 minutos. La protagonista era Laia Flores, que se apuntaba otro triple a su cuenta personal (71-48). Mawuli asumía también galones y era quien movía la puntuación maña mientras Valencia Basket se venía más arriba, casi sin resistencia, y ampliaba la diferencia a través de todas sus jugadoras.

Los últimos minutos pasaban con poca emoción, mientras los aficionados valencianos celebraban en las gradas. Las canastas en ambos lados, más para las campeonas, maquillaban el resultado hasta el 84-60 definitivo.

En resumen, Casademont Zaragoza no ha tenido opciones en la final, pero ha quedado demostrado en el torneo que este equipo tiene mucho que ofrecer. Cabeza alta y recordar que, para perder una final, primero hay que jugarla. La semana que viene, el inicio de la Liga Femenina Endesa.