Almudena, la zaragozana que diseña joyas con leche materna como las de Cristina Pedroche: "Es un recuerdo para siempre"
- Esta madre comenzó el proyecto tras la dura lactancia con su primer hijo Gabriel.
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Las joyas son siempre un acierto cuando no sabes qué regalar. Unos pendientes, un collar, una pulsera… Pero para hacer de una de estas piezas algo todavía más especial y dotado de significado existen las joyas hechas con leche materna. Un concepto casi desconocido hace unos días, hasta que Cristina Pedroche lució en las campanadas de Nochevieja un diseño hecho con cristales creados a partir de gotas de su leche materna.
A raíz de esta aparición muchas mujeres se han interesado por ellas, pero madres como Almudena llevan años trabajando con ellas. Esta aragonesa se dedica a diseñar joyas hechas con leche materna, pelito y cordón umbilical para que madres y padres puedan guardar un recuerdo eterno de una etapa muy bonita.
Desde muy pequeña, Almudena hacía sus propios pendientes, pulseras u otras cosas con su abuelo, sin ninguna relación con lo actual. Pero, a eso que era un hobby, se le añadió un hecho que desembocó en su actual profesión: el nacimiento de su primer hijo, Gabriel.
Su hijo es un Niño Altamente Sensible (NAS) y, como ella misma explica, necesita mucha más atención, le afectan mucho más los ruidos, las luces y necesita todo el rato contacto físico y muy directo. Tras una lactancia realmente dura, Almudena tuvo que “reinventarse”. “No podía volver a trabajar, pero necesitaba trabajar para sentirme yo, y me busqué mi camino”. Así pues, esa afición que tenía con su abuelo cada verano, se convirtió en su nuevo proyecto.
La idea de hacer las joyas con la leche materna surgió por el deseo de guardar un “pequeño talismán” del período de lactancia. "Yo quería tener un amuleto de todo lo que habíamos luchado y de lo que mal que habíamos dormido, para recordar siempre esos momentos y tenerlo con nosotros. Queríamos convertirlo en algo bonito”, continúa Almudena.
Así pues, la zaragozana se puso a investigar y “a base de prueba y error” llegó a cristalizar la leche y conseguir hacer una piedrecita de cristal con ella. Un proceso que lo hace ahora a menudo desde su propio taller y que da vida a ‘La Joya de mi Bebé’, el nombre de su marca.
De media, cada joya puede costarle entre 3 o 4 semanas de trabajo, aunque depende del modelo, de si es un molde personalizado o de cuánto le cueste cristalizar a la leche.
Un recuerdo especial
Por otra parte, al ser un regalo tan personal, Almudena cuenta que siempre habla directamente con cada madre o padre, para que cada pieza tenga sentido y represente mejor su lactancia. “Para unos puede servir un corazón, un elefante o cualquier otra cosa. Yo puedo hacer todo”, señala.
Cada pieza se compone de plata y de cristal y como ejemplo de sus artículos, unos pendientes de perlas cuestan alrededor de 60 euros
La aragonesa admite que no se imaginaba la acogida que tuvo, pues es un regalo que o “te encanta, o te genera rechazo”, reconoce. Sin embargo, a la mayoría de madres les produce buenas sensaciones y les conecta con la maternidad, a veces pasada.
En definitiva, de una mala experiencia sacó un bonito desenlace que, además, puede compartir: “Las hago para que las mamis las lleven orgullosas de todo lo que han conseguido”, finaliza Almudena.