Kiko Rivera es uno de los personajes que más horas está llenando la programación de Sálvame en Telecinco, y no solo por los frentes que tiene abiertos con su madre, la tonadillera Isabel Pantoja. Y es que el formato de corazón de La Fábrica de la Tele está desempolvando viejas cámaras ocultas que se hicieron al DJ y cantante. A inicios de mes se emitía un vídeo de 2006, grabado sin su conocimiento, en el que Rivera charlaba con Gustavo González y en el que hablaba sobre sus relaciones de familia.
Este lunes, el programa ha ido todavía más atrás y ha emitido una cámara oculta del año 2004, cuando Kiko Rivera tenía 20 años. En las imágenes aparece Kiko dentro de un coche con un periodista, y durante la charla revela por qué “cortaron” su madre Isabel Pantoja y María del Monte, dos tonadilleras que mantenían una estrecha amistad.
El periodista anima a Kiko a que cuente lo del “medio kilo” (en lo que parece una referencia a medio millón de pesetas, 3000 euros actuales). Al parecer, había “medio kilo” en un armario y María del Monte “se lo cepilló”. “Por eso cortaron” explicaban, mientras Kiko Rivera asentía y añadía más información: “Mi vieja me echó la culpa a mí. ¡Si yo te cojo no es medio kilo, son tres!”.
En el vídeo también aparece Kiko Rivera cobrando en mano un adelanto por una entrevista, dinero que parece que se cobró “en B”, es decir, sin declarar a Hacienda. Kiko también habló entonces de Julián Muñoz, entonces pareja de su madre Isabel Pantoja. “Yo creo que se ha acabado hace tiempo, a mí no me cuenta nada, pero se ve la forma que se levanta uno, cuando tal…”, apuntaba el sevillano, anticipando lo que sería el fin de la relación.
En otro momento, la cámara oculta recoge cómo le preguntan a Kiko Rivera si “sigue con la farlopa” (cocaína). El hijo de Paquirri respondía que no sigue consumiendo y que a su madre le había contado que la había “probado” como otras personas de su edad.
La emisión de este vídeo sentó muy mal a Anabel Pantoja, prima de Kiko. “Que él haga sus trapicheos, que lo hiciera bien, mal o regular pero que una persona la grabe con cámara oculta sin él saber que está siendo grabado no tiene derecho”, se quejaba la influencer. “Es como si mi primo le hace una cámara oculta al periodista. Tendrá culpa en lo que tenga, pero el sucio es el que le graba a escondidas”.
Algunos de sus compañeros se le echaron encima, y ella se angustió, en especial, cuando volvieron a decir que Kiko Rivera tenía problemas de adicciones y que Isabel Pantoja lo sabía y no hacía nada. “No voy a seguir, a ver si Isabel Pantoja es la única que no se encarga de sus hijos” decía saliendo del plató.