El fenómeno turco no es exclusivo de España: Turquía, segundo mayor exportador del mundo
- El gobierno turco se ha fijado como objetivo llegar a mil millones de dólares en exportaciones en ficción.
- Por qué no hay escenas de sexo en 'Love is in the air': lo que esconde el puritanismo de las series turcas
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Aunque las series turcas ya llevaban un tiempo acampando en la TDT con grandes éxitos como Fatmagül, Hercai o El Secreto de Feriha, no ha sido hasta su salto al prime time de Antena 3 y Telecinco cuando se ha empezado a hablar de una especie de 'invasión turca' en nuestra televisión.
Actualmente, Antena 3 dedica tres de sus noches a este tipo de ficción con el fenómeno Mujer en lunes, martes y miércoles, y Mi hija en domingo. Mientras, Telecinco dedica las noches de martes y miércoles a Love is in the air y los late night de martes, miércoles y jueves a Mi hogar, mi destino.
Sin embargo, este fenómeno no es exclusivo de nuestro país. Países como Rusia, China, Corea del Sur, México, Argentina o Chile son grandes consumidores de este tipo de culebrones. Hasta el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, anunció en Twitter que estaba enganchado a Resurrección Ertugrul (Diriliş Ertuğrul), una serie de corte histórico que narra las aventuras de Ertuğrul Ghazi, el padre del sultán Osman, el fundador del imperio otomano.
Todo empezó cuando un canal búlgaro empezó a emitir Las mil y una noches, que en España fue emitida por Nova. Aquella cadena pasó de un 15% de audiencia a un 60%. Y lo mismo ocurriría con esta serie en Chile, donde aún sorprendió más que un culebrón turco plantara cara a las clásicas telenovelas.
Sería el principio de lo que estaba por llegar. En apenas unos años, la ficción turca se ha convertido en la nueva gran sensación mundial hasta el punto de haberse convertido en el segundo mayor exportador de producto audiovisual en el mundo, sólo por detrás de Estados Unidos.
Tanto es así que, antes de la pandemia del COVID-19, el gobierno turco esperaba que las exportaciones de su ficción alcanzaran los mil millones de dólares. Unas expectativas que, sin embargo, el mercado ha rebajado hasta los 500 millones de dólares. Unos datos espectaculares comparados con lo que recaudaron hace tan sólo seis años -250 millones de dólares, en 2015-.
Un gran margen de beneficio
Unas de las claves de estos ingresos es que el margen de beneficio es bastante grande, ya que actualmente producir cada episodio cuesta de media unos 250.000 euros, la mitad de lo que cuestan los de una serie española.
En España se están pagando entre 3.000 y 10.000 euros por episodio dependiendo de si emite en un canal generalista o en uno de TDT. Pero es que ha habido países que han llegado a pagar hasta 100.000 dólares por capítulo.
Por ello y, porque esta ficción está ayudando a mejorar la imagen del país, no es de extrañar que desde el gobierno de Recep Tayyip Erdogan se esté dando apoyo financiero a estas series siempre y cuando se emitan en el extranjero.
Según datos del Ministerio de Cultura y Turismo de Turquía, más de 150 ficciones turcas se han exportado a más de 150 países y han sido vistas entre 500 y 600 millones de personas en el mundo en los últimos años.
Las producciones más vistas y que más ingresos han generado son, entre otras, Amor de contrabando (Kara Para Aşk), vendida a 107 países y que se pudo ver en Nova; El Secreto de Feriha (Adını Feriha Koydum), Fatmagül (Fatmagül'ün Suçu Ne) o Amor prohibido (Aşk-ı Memnu), que también se vieron en el canal de Atresmedia; Kuzey Güney, una versión de Hombre rico, hombre pobre y Kara Sevda (Amor eterno), que se vieron en Divinity; o Muhteşem Yüzyıl (El Sultán) y Serifin Kizi (La hija del embajador), que pronto llegarán a Nova.
No serán las únicas en llegar próximamente a la TDT. Además de La hija del embajador y El Sultán, que será la primera incursión de Nova en las novelas históricas, también llegarán El hombre equivocado (Bay Yanlis), Meryem, Sisterhood (Sevgili Geçmiş), Masumlar Apartmanı y Sadakatsiz (Infiel). Mientras, Divinity estrenará el próximo lunes Ömer, sueños robados.