Este domingo se estrenaba Rocío, contar la verdad para seguir viva, una serie documental en la que Rocío Carrasco ha hablado por primera vez de cómo ha sido su relación con Antonio David Flores, el padre de sus hijos. En los dos episodios en los que la hija de Rocío Jurado narró diversos pasajes de violencia, verbal y física, de los que fue víctima.
“Aprovechaba para insultarme, me increpaba, decía 'te los voy a quitar y te van a odiar, hija de puta”, explicaba en los primeros minutos del programa, en referencia a sus hijos. Afirmó que Antonio David le hizo “alguna agresión verbal”. “No sirves para nada, estás gorda, eres tonta”, le habría dicho el guardiacivil.
“Recuerdo un tirón de pelos, me coge del pelo y me da para abajo pero no sé de dónde viene el porqué de eso. Yo siento por un lado que me quiero ir a mi casa, lo cual no voy a hacer, y por otro estaba que no me podía mover, pero digo me levanto y lo reviento. Pero no hice ninguna de las dos cosas. No tengo claro cómo pasó, pero pasó y fue a mayores” narró Rocío Flores. “Estaba sentada en un sofá, (junto a) una mesa camilla, y él me agarra el pelo, y me pega un tirón de pelos y me da con la cabeza en la mesa”, explicaba también.
El testimonio de Rocío Carrasco ha generado, como era de esperar, multitud de reacciones, entre las que destaca la de Irene Montero, la ministra de Igualdad, quien ha expresado a través de Twitter que Rocío Carrasco es “una víctima de violencia de género” y que ella le cree. “Cuando una mujer denuncia públicamente la violencia puede ser cuestionada o ridiculizada. Por eso es importante el apoyo” apuntaba la mandataria, que destacaba la importancia de “arropar a una mujer que da el paso de contar su experiencia de violencia” y que relatos así pueden servir para “concienciar y protegernos de la violencia machista”.
En el plató, los invitados estaban sobrecogidos tras el capítulo cero; tras su emisión, el programa supo jugar muy bien con los silencios, con las reacciones. Todos daban por cierto el testimonio de Rocío, algunos se disculpaban por cosas que habrían dicho de ella en el pasado. Antonio David salió muy mal parado de ese relato, su imagen pública queda gravemente mancillada; Rocío aportó pruebas médicas y psicológicas que avalaban su versión.
La pregunta que ronda ahora en el aire es si Telecinco apartará de su plantilla rosa a alguien a quien se ha señalado como maltratador, o si todo seguirá como hasta ahora. Con David ocupando una silla en Sálvame, dispuesto a devolver todas las pelotas que le vayan lanzando, como parte del show.
Recordemos que esta última semana, la cadena decidía recortar al máximo las intervenciones de Carlos Algora en La isla de las tentaciones después de que se le investigase por un delito sexual, una agresión múltiple a una joven estudiante en una fiesta ilegal el pasado mes de febrero. Le borraron del programa.
Aquí, sin embargo, hay un ingrediente más que lo vuelve todo aún más complicado si cabe. Y es que Antonio David Flores no maltrató a Rocío Carrasco, según una sentencia judicial. En 2018 se archivaba una denuncia porque el fiscal no consideraba acreditada “la existencia de un delito de lesiones”.
El propio Antonio David recordaba este hecho hace unos días, previa emisión del documental. “Quiero que quede claro, mi exmujer me denunció por violencia de género tanto física y psicológicamente y fui absuelto. La voy a denunciar y la voy a llevar a un juzgado. No voy a pasar tres años encerrado en mi casa porque me había puesto una etiqueta y me moría de vergüenza” señalaba el colaborador de Sálvame.
“En mi vida la he faltado el respeto ni la he tocado ni un dedo. Me voy a querellar contra ella. Estoy preparado, mi familia no va a volver a pasar por esto. No tiene la verdad absoluta. No voy a permitir que ella vuelva a hacer creer a la sociedad que soy una persona que la ha maltratado”, añadía.
Sin embargo, después de la emisión, es fácil ver a este malagueño como una persona violenta, pues nadie le defendió. Ana Pardo de Vera le llamó “maltratador típico de fase 1”. Jorge Javier Vázquez, presentador del programa, se preguntaba en qué ha “contribuido” él en el dolor de Rocío. “Antonio David es un monstruo porque conocí a Rocío recién separada”, comentaba por su parte Belén Rodríguez, íntima amiga de Carrasco y azote de Flores durante el tiempo que ambos coincidieron en Sálvame.
El doble juego de Telecinco
Tras esta emisión, Telecinco ha dejado claro que ha jugado a dos bandas. Según lo que han explicado en la cadena, esta serie documental Rocío, contar la verdad para seguir viva se ha gestado durante un año. Muchos meses en los que se daba trabajo como colaborador a un presunto maltratador, alguien a quien se estaba dibujando de violento entre bambalinas.
Mientras esta producción estaba en el horno, se preguntaba a Antonio David en Quiero dinero si había mantenido relaciones íntimas con Rosario Mohedano, prima de su exmujer Rocío Carrasco, o si se llevó “una caja fuerte con relojes y cosas personales de Rocío Carrasco del dormitorio que compartíais en casa de Rocío Jurado”.
En Sálvame potenciaban su lado carismático y agradable, el más simpático. Hasta le travestían y le ponían a cantar por Rocío Jurado en la sección La verbena de Sálvame.
En el otro lado de la balanza está lo que archivó la ley. Que Antonio David no es culpable de un delito de maltrato, y entonces hay que preguntarse si tiene sentido esta serie, y si no puede resultar frívolo una producción de este tipo, que vuelve a exponer al juicio público a alguien cuyo caso se archivó.