En el año 2001, un joven albañil cántabro llamado David Bustamante quiso dejar el andamio por el micrófono. Probó fortuna en un programa llamado Operación Triunfo, y le fue de maravilla. Aquel joven de 19 años, con fama de llorón, quedó en el top 3 del programa, y fue elegido por Televisión Española para ir, en calidad de corista, al Festival de Eurovisión de 2002.

Desde entonces, Bustamante se convirtió en un ídolo de masas, y gracias a los medios de comunicación hemos podido seguir su carrera, que se ha mantenido en lo más alto de la música de nuestro país.

Este año, David cumple dos décadas como artista, y lo celebrará con una gira de conciertos (con todas las medidas de seguridad). Pero además, sacará tiempo para competir en MasterChef Celebrity, el concurso de Televisión Española en el que famosos de todo tipo ponen a prueba su disciplina y su creatividad ante los fogones.

Allí competirá, codo a codo, con Vanesa Romero, Eduardo Naverrete, la cantante Tamara, Victoria Abril, Verónica Forqué o Iván Sánchez, entre otros. De esta manera, David volverá a ponerse a prueba delante de las cámaras, demostrando que es mucho más que un cantante, y que sabe crear contenido de entretenimiento como pocos.

De juez a concursante y viceversa

Y es que el perfil de David Bustamante en televisión es muy rico, ya que durante estos 20 años a su lado le hemos visto en varios talent show, cambiando de rol de jurado a concursante según haya correspondido. Y en programas de todo tipo, de canto, de baile, de variedades.

En el año 2013 le veíamos así trabajar en El número uno, de Antena 3, un programa que tuvo dos ediciones. Él fue el único miembro del jurado que estuvo los dos años, y compartió espacio de trabajo con Mónica Naranjo, Pitingo, Ana Torroja o Sergio Dalma. Jadel, uno de los ganadores, se convirtió a raíz del programa en compositor de algunos de sus temas, y en entrevistas promocionales aseguró haberse sentido muy identificado con todos los concursantes.

En los años siguientes, Bustamante continuó trabajando de forma puntual de jurado, en programas como Tu cara más solidaria y Mira quién va a Eurovisión, donde salió ganadora Ruth Lorenzo. En 2016 se convierte en jurado de Top Dance, un breve talent de Antena 3 que giraba alrededor del baile. Compartía responsabilidades con Mónica Cruz y Rafael Amargo, y le vimos bailar en alguna ocasión. El formato no cuajó y fue cancelado antes de cumplir un mes en pantalla.

Todavía en 2016, y de nuevo de la mano de Atresmedia, el cántabro se anima a ser jurado de ¡Eso lo hago yo!, que terminó emitiéndose en laSexta. Otro formato de breve recorrido, que tampoco aguantó un mes.

Poco a poco le veíamos soltarse la melena, pasárselo bien haciendo entretenimiento. En Top Dance David se puso unos tacones y se puso a bailar, en este último programa cogió a Silvia Abril en volandas para improvisar algunos números pasos de danza. Demostraba que, a pesar de tomarse muy en serio como cantante, también era un gran showman.

En 2017, David Bustamante vuelve a su casa, Operación Triunfo, pero como jurado invitado, y en 2018 le da una vuelta a su carrera y se convierte en concursante. Fue en Bailando con las estrellas, en Televisión Española, y ahí tuvo la suerte que le faltó en OT. Se convirtió en el absoluto ganador, demostrando junto a su pareja de baile Yana Olina que puede moverse sobre la pista como pez en el agua.

“Muchísimas gracias a todas las personas que habéis estado ahí siempre, durante 17 años y a los que os habéis ido uniendo. Gracias por estar ahí y permitirnos hacer un espectáculo blanco, que la televisión atraviesa unas horas muy malas”, dijo al saberse ganador, en un mensaje que muchos identificaron como un dardo envenenado a Telecinco.

Tras ser coach y asesor en La Voz y La Voz Senior en Antena 3 (donde se reencontró con David Bisbal), el cantante continuó ligado a la cadena con El Desafío. 

Allí tuvo una trayectoria irregular. No superó los dos minutos en la prueba de la apnea, y no le fue demasiado bien el billar extremo o la prueba de carabinas. En el duelo de parejas bailando volvió a verse con Yana Olina, y comenzó a mejorar en pruebas como la escultura con sillas.

Congenió muy bien con Pablo Puyol, y Gemma Mengual le entregó su premio en una de las noches para que lo donase a la ONG que quisiera. Al final, terminó la competición como quinto clasificado.

Ahora Bustamante volverá a ser concursante en MasterChef. Casualmente, desde Telecinco, Jorge Javier Vázquez ha cargado contra este formato por fichar a Victoria Abril, negacionista del covid. “Programa blanco, tururú”, decía el presentador hace unas semanas, unas palabras que bien podrían servir también como un mensaje velado al cantante cántabro.