En los últimos meses la crónica negra ha plagado varios programas de televisión. Documentales o el mero tratamiento informativo de noticias relacionados con crímenes y delitos, copan horas de pantalla para regocijo de una audiencia ávida de morbo y misterio. Entre los profesionales que han ocupado asiento en los espacios dedicados al análisis de estos sucesos destaca el nombre de Óscar Tarruella, un hombre poco conocido por el gran público y que, sin embargo, tiene una larga trayectoria en el show bussiness de nuestro país. 

La pasión con la que este criminólogo narra cuáles son los detalles que ha obtenido a partir de sus investigaciones le está haciendo merecedor de un hueco en los programas que solicitan este tipo de contenido. Una labor, la de estudiar crímenes sin resolver, que viene desarrollando desde hace años y que está explotando públicamente desde no hace mucho tiempo. Pero... ¿Quién es Óscar Tarruella?

El experto en crímenes preferido de Telecinco ejerció de Mosso d'Escuadra hasta que optó a dedicarse a llevar la carrera artistica de la que fue su pareja sentimental: Mónica Naranjo. La llamada 'pantera de Figueras' y el cuerpo de seguridad catalán estuvieron juntos durante quince años, una relación que siempre fue llevada de manera muy discreta ante los medios, tal y cómo la cantante gestiona todos los asuntos que rodean su faceta más privada. Poco se sabía del hombre que compartía su vida con la estrella, un perfil bajo que con el paso del tiempo el criminólogo ha decidido dejar atrás.

En octubre del 2019 la pareja decidió tomar caminos por separado. Una ruptura que, aunque discreta, no estuvo exenta de algún que otro choque entre las dos partes. Declaraciones que se tradujeron en reproches públicos y que fueron recogidos por los diferentes medios dedicados al corazón, aunque estos no generaron un gran escándalo que colocase a sus protagonistas en la picota mediática. 

Si bien es cierto que Tarruella siempre ha sido un gran enamorado de su profesión, la criminología, durante su etapa junto a Mónica estuvo ejerciendo de representante tanto de esta como de otras artistas. Este es el caso de Edurne, a quién llevó durante una de las etapas profesionales más trascendentales en su carrera, su participación en el Festival de Eurovisión 2015. La relación profesional entre la ahora jurado de Got Talent y Óscar se terminó en mayo del 2018, tres años juntos de los cuales ambos parecen guardar un grato recuerdo. 

Una vez finiquitada su faceta como representante, Tarruella pudo comenzar a retomar su verdadera vocación de investigador. Una faceta que alimentó con ayuda de las redes sociales, donde mostró especial interés por casos de gran calado mediático. La muerte de Cristina 'La Veneno', en el 2016, fue uno de los primeros asuntos que trató. Primero en su cuenta de Instagram y después en su canal de YouTube, bajo el título 'Crímenes Imperfectos', plataformas en las que empezó a generar contenidos que poco a poco fueron enganchando al público. Simulaciones de autopsias, informaciones inéditas y una gran implicación en el caso, convirtieron a Tarruella en uno de los grandes expertos dedicados a este asunto. Una muerte, la de Cristina, que con el éxito de la serie de los Javis volvió a ponerse sobre la mesa brindándole así a Óscar la oportunidad de ir haciéndose en un hueco en televisión. 

Su buena dote para dibujar perfiles psicológicos le llevó a participar en algún que otro debate del que posiblemente haya sido uno de los productos televisivos más controvertidos de este último año, el documental de Rocío Carrasco. Durante la emisión de los mismos, Óscar Tarruella contó con alguna que otra aparición donde analizó algunos aspectos de la personalidad de Antonio David Flores. Análisis profesionales que llenaron minutos en televisión y que fueron el pistoletazo de salida de una nueva trayectoria frente a las cámaras. 

Pero si de algo no hay duda, es que la recuperación mediática del caso de la muerte de Mario Biondo ha sido el espaldarazo definitivo de Óscar Tarruella para estar en los medios de comunicación. El criminólogo lleva años analizando este caso a través de sus propios canales de difusión, hasta el punto de convertirse en una de las personas de confianza en España de la familia del fallecido cámara. Desde que Mediaset ha decidido dedicar programas especiales a este caso tan truculento, el ex Mosso d'Escuadra ha sido uno de los imprescindibles en los diferentes platós. Una visión profesional y combativa de un hombre que cada vez está más suelto ante los envites del resto de colaboradores. Unas tablas que poco a poco lo están convirtiendo en el criminólogo estrella de la televisión. 

Defensor de la figura del criminólogo, Óscar Tarruella bebe de la influencia que otros profesionales en esta materia desarrollan en las televisiones de países como Estados Unidos. Figuras a las que les entusiasma analizar palmo a palmo cada uno de los detalles que rodean a casos sin resolver o con flecos sueltos, y que hacen las delicias de un público enganchado a la adrenalina que produce el ver en televisión el reflejo de la maldad humana. Un fenómeno que no es nada nuevo en la televisión de nuestro país y que parece estar de nuevo repuntando gracias a casos con protagonistas muy mediáticos. Asuntos que revisten de gran gravedad y que parecen ser respaldados por una audiencia ansiosa de morbo.