Apenas cuatro meses después del regreso de Carmen Borrego a Sálvame, Terelu Campos ha sellado definitivamente su largo y duro conflicto con el programa y también ha vuelto para ponerse al frente de Sálvame Lemon Tea. De esta manera ha comenzado a escribirse un nuevo capítulo en la historia de la relación entre las Campos y el programa de La Fábrica de la Tele.

En este nuevo tiempo de aparente armonía entre todas las partes hay una persona que se queda fuera de la ecuación: Alejandra Rubio. La colaboradora de Viva la vida ha demostrado ser el verso libre de su familia y no ha dudado en enfrentarse a su propia tía frente a las cámaras, llegando a causar evidente incomodidad en su madre por su forma de expresarse sin tapujos.

Sin embargo, la nueva situación laboral de la familia deja a Alejandra sola ante el que hasta hace poco era el enemigo común de las Campos: el programa Sálvame. Ahora que Terelu y Carmen han plegado velas, el frente familiar contra el formato se ha disuelto y la hija de Terelu lo tendrá más difícil para encontrar respaldo en su particular guerra.

Cabe recordar que Alejandra se ha enfrentado a varios colaboradores de Sálvame, la mayoría de las veces como consecuencia de sus conflictos familiares. La joven ha llegado a ser apodada en el programa como Alejandra 'Turbio', una burla que pronunció Kiko Hernández y que no hizo ninguna gracia a la joven, quien se refirió al colaborador como "ese señor".

Matamoros también ha tenido su particular enfrentamiento con la hija de Terelu. El colaborador aseguró que el problema principal entre Alejandra y Carmen eran los celos de Borrego hacia su sobrina. "Le aconsejo que cambie de fuentes", respondió la influencer desde Viva la vida. "Mi fuente eres tú", espetó Matamoros, poniéndola contra las cuerdas.

La marcha de Carmen al programa de La Fábrica en plena escalada de tensión con su sobrina dibujó mejor que nunca los bandos. De hecho, Alejandra Rubio llegó a hacer un desplante en directo al espacio, negándose a atender en directo a uno de sus reporteros durante un evento.

Aquel episodio enfadó a varios de los rostros de Sálvame, sobre todo a María Patiño, que disparó contra la joven: "A mí las personas que dan una patada a la prensa según el programa que sea, me revienta (...) El programa 'Viva la vida' es exactamente igual que este programa", aseveró la periodista.

"Puedo entender que les fastidie que no quiera entrar, porque al final que yo entre ahí y esté Carmen... entiendo el interés", respondió la aludida desde su programa.

Estos desencuentros han ido enfriando la relación de Alejandra Rubio con Sálvame, pero la reconciliación de Terelu con Carmen y el regreso de ambas al programa dejan ahora a la joven en una posición complicada. Sobre lo que opina de la vuelta de su madre al formato de la Fábrica, la influencer se ha limitado a decir a Europa Press que le parece "muy bien todo lo que sea trabajo", sin entrar a valorar este repentino cambio de criterio en su familia.

De esta manera, Alejandra Rubio se convierte en la principal damnificada del regreso de Terelu y Carmen a Sálvame. Y es que, si bien con esta reconciliación las aguas parecen volver a su cauce, todo lo que el frente familiar ha defendido en este tiempo ahora se desmorona y la joven tiene que ver cómo su madre y su tía se olvidan del rencor y comparten plató con quienes hasta ahora eran sus enemigos.

Quizás esta experiencia le sirva a la colaboradora de Viva la vida para seguir el consejo que en su día le dio Jorge Javier Vázquez: "Lo tiene complicado si no decide emanciparse ya y cortar con la familia. Esto es gracioso para un determinado tipo de televisión, pero si quiere hacer una carrera larga...", deslizó el catalán. El tiempo dirá si toma nota y decide mantenerse al margen la próxima vez que su familia tenga un conflicto en plató.