Cambio inesperado en la parrilla de Telecinco. La cadena de Fuencarral reajustará su programación este lunes 28 de febrero para emitir en la sobremesa la que ha sido una de sus apuestas más fuertes de la temporada, Pasión de Gavilanes. La segunda temporada de la serie colombiana, que se ha estado emitiendo en el prime time desde su arranque, hará acto de presencia en la misma franja horaria que ocupa Lemon tea. Una variación de última hora que corresponde a una intención de reactivar la audiencia de la segunda parte de la exitosa telenovela.

De momento, no se conoce en qué consiste este cambio de última hora. No existe información alguna que haya revelado la posible reducción, cambio de emplazamiento o directamente eliminación, del espacio que presentan María Patiño y Terelu Campos en las tardes de Telecinco a favor de la producción latinoamericana. Un misterio que se revelará a comienzos de la próxima semana. 

Algunas de las hipótesis extraoficiales que se barajan, es que Telecinco emita en la sobremesa un avance del próximo capítulo y no uno completo. Una conjetura que, fuera como sea, invade el espacio de Lemon tea y reduce o agota totalmente su tiempo de desarrollo.

Esta última decisión de la cadena de Paolo Vasile, responde a la tibia acogida que la segunda temporada de Pasión de Gavilanes ha tenido en la televisión de nuestro país. Pese a la elaborada e intensa promoción, la serie no ha conseguido arrasar en lo que a share respecta. En su estreno, la telenovela acaparó un 16'2% de share y una media de 2.059.000 espectadores. Cifras que se redujeron hasta el 10'5% y los 1.235.000 televidentes en su segunda noche de emisión, en la que Antena 3 contraprogramó con un capítulo especial de la exitosa serie turca Tierramarga.

Ninguna de las emisiones de Pasión de gavilanes ha conseguido arrebatar el liderazgo a Antena 3. Una situación nada favorable para Mediaset, que habría invertido una elevada suma económica para adquirir los derechos de la misma en nuestro país. Una decisión que, por el momento, no ha cosechado los frutos deseados y que desde la cadena de Fuencarral tratan de remediar con este sorprendente cambio.