Los planes de la pareja más mediática de Secret Story se han visto truncados desde que Marta sufriera un aparatoso accidente en su viaje a Punta Cana. Tras su paso por el reality, los exconcursantes no han parado de hacer planes juntos y vivir numerosas aventuras que muestran cada día a sus seguidores en redes sociales y en su canal de Mtmad.
El último suceso que conocíamos hace un par de semanas, fue el accidente que sufrió Marta mientras estaban de escapada romántica en el Caribe. La teniente de alcalde se resbaló mientras estaban en la piscina, rompiéndose la rótula en dos partes y necesitando ser operada de urgencia.
Tras una primera valoración en la clínica y diversas pruebas, el hospital les pedía un presupuesto de 30.000 euros de operación. El seguro que llevaban contratado desde España, les cubría 20.000 euros de ese presupuesto, por lo que decidieron operar a la concursante en España. "Siempre el dinero va por delante", explica Adrián.
"El seguro nos consiguió unos billetes en business porque Marta tenía que ir con la pierna estirada y en esos asientos te podías tumbar", comenta Adrián. A su llegada a Madrid, les recogió una ambulancia que les trasladó hasta Zaragoza, donde les confirmaron que le operarían en Torrecilla de Alcañiz.
Una semana después del percance, la exconcursante ha sido operada en su pueblo. "De momento tres o cuatro semanas inmovilizada y luego tendrá que hacer rehabilitación", explicaba el aragonés. La teniente alcalde comenzará su rehabilitación el 3 de octubre, si todas las pruebas continúan bien.
A la exconcursante le han puesto dos clavos y un cerclaje que le sujeta. Además, antes de que pase un año tendrá que volver para que se lo quiten.
El postoperatorio parece ir lento e incluso la pareja confiesa que los primeros días tenía mucho dolor. Respecto a su día a día, Marta necesita siempre estar acompañada por alguien para poder hacer cualquier cosa. Además, confiesan que el accidente les ha retrasado todos los planes de futuro.
En cuanto a su experiencia con el hotel de Punta Cana, la pareja destaca que hubo gente del hotel que se portó muy bien con ellos, mientras que a algunos había que insistirles mucho para que incluso les acercaran un plato de comida a la habitación para Marta.