Ha llegado el momento. Sálvame se despide para siempre este viernes tras 14 años ininterrumpidos en Telecinco. Lo hace después de haber sido uno de los pilares fundamentales de la cadena, al haber generado tanto contenidos como personajes propios. Pero la cosa no se queda ahí, ya que el programa de La Fábrica de la Tele también ha revolucionado el lenguaje en televisión.
Durante este tiempo, no todo ha sido bocadillos de chóped, broncas, salidas del plató de los colaboradores o los chumineros. Más allá de todo esto, y a sabiendas que Sálvame ha hecho muchísimascosas mal, es de justicia reconocer que la telebasura -término despectivo con el que muchos se refieren del programa- ha hecho mucho más por promover la cultura que otros programas.
Para empezar, Sálvame ha ayudado a llenar teatros. Los rostros más importantes del formato han sabido aprovechar la ventana que tenían en Telecinco para invitar, una y otra vez. a que la gente acudiera a sus proyectos. Vale que es autopromo, pero al final están echando una mano a levantar el sector de las artes escénicas.
Es el caso de Jorge Javier Vázquez. El presentador paraba de informar a la audiencia de las fechas y las ciudades en las que actuaba con su obra musical Grandes Éxitos. Paz Padilla, otro de los rostros de programa, también invitaba a los espectadores a que acudieran al teatro para que disfrutasen de Desatadas, una obra escrita por Félix Sabroso. Y, recientemente, Kiko Hernández habló sobre Las Troyanas, una función dirigida por Fran Antón.
Además, con motivo del Día Mundial del Arte, Sálvame transformó a sus colaboradores en las obras más famosas de la pintura española. Fue en 2017, bajo la sección Hechos un cuadro. Así, vimos a Jorge Javier como el conde-duque de Olivares; a Paz Padilla como la Galarina de Dalí; a Belén Esteban en Dora de Maar de Picasso; a Mila Ximénez de Menina o a Chelo García Cortés como la maja vestida de Goya. Luego, el pintor Antonio Decinti se encargó de llevarlos al lienzo creando la pinacoteca de Sálvame, cuyos cuadros se subastaron por una causa benéfica.
Pero no es la única vez que los tertulianos de Sálvame se han disfrazado de personajes de diferentes ámbitos de la cultura. Ha habido muchas ocasiones. En 2010, por los 400 programas, se vistieron de personajes de cómics: Jorge Javier fue Spiderman; Kiko Hernández, Batman y la Esteban, Lara Croft. En 2016, Lydia Lozano homenajeó a David Bowie, que acababa de fallecer, saliendo al plató caracterizada de la leyenda de la música.
El magacín también ha rendido tributo a programas históricos de la televisión. Para celebrar su segundo aniversario, Sálvame homenajeó al emblemático Un, Dos, Tres... responda otra vez. No faltaron ni las azafatas, ni los tacañones ni la famosa calabaza. Además, el programa contó con la presencia de una de sus presentadoras, Mayra Gómez Kemp.
Los retratos de Ouka Lele y Mariscal
Sálvame siempre ha intentando celebrar sus hitos a lo grande. Por ejemplo, por el quinto aniversario, la artista internacional Ouka Leele retrató a Jorge Javier, Belén Esteban y compañía en un mural que se colgó en uno de los edificios de Mediaset en Fuencarral. La fotógrafa contó que fue su hija, María Rosenfeldt, quien la convenció de ejecutar el proyecto. Inspirado en Bollywood, el mural se dio a conocer como Olimpo de Sálvame.
En el retrato, cada colaborador representa una cosa. Lydia Lozano es el glamour de los años 80; Mila representa el nirvana, por encima del bien del mal; Paz Padilla es una mujer guerrera; Matamoros es un guerrero fenicio pero dulce o Karmele Marchante tiene inspiración japonesa. Eso sí, el personaje central, el Dios del Olimpo, es Jorge Javier.
Para conmemorar su octava temporada, Javier Mariscal retrató, en colaboración con la fotógrafa Elena Claverol, a todos los rostros del programa en una peculiar versión de 13, Rue del Percebe. "Desde el primer día les dije que no tenía tele y que no había visto nunca el programa. Por tanto, al ser virgen, no tenía prejuicios", dijo el creador de la mascota de los Juegos Olímpicos de Barcelona 92.
La música también ha estado muy presente en Sálvame, y no solo por el Mediafest. El programa de La Fábrica de la Tele ha ayudado a promocionar Eurovisión. Quizás haya quien no lo recuerde (o no lo sepa directamente), pero Karmele Marchante estuvo en la carrera por Eurovisión 2010. La colaboradora, que participó con el nombre Popstar Queen y la canción Yo soy un tsunami, se quedó fuera al no cumplir con las bases del concurso.
Cuando Loreen fue a 'Sálvame'
En 2012, Loreen, la flamante ganadora de Eurovisión 2023, acudió al plató de Sálvame para promocionar Euphoria, la canción con la que también logró vencer en el Festival. Además, en los últimos años, en los que España ha subido de nivel, el programa ha apoyado a nuestras representantes, Chanel -Carmen Alcayde la homenajeó- y Blanca Paloma.
Sálvame, además, ha dado tiempo a numerosos cantantes para que promocionaran sus trabajos ante la audiencia de Telecinco. Demarco Flamenco, Miguel Nández (OT 2), Romano Aspas y Leticia Sabater son algunos de ellos. Todo por el espectáculo... y por la cultura.