A muchos, el nombre de Remedios Cervantes nos recuerda a uno de los momentos más virales de la televisión. La modelo, que se ganó la popularidad después de coronarse Miss España en 1986, dejó a cuadros a un concursante de Atrapa un millón cuando, en el último segundo, cambió de trampilla el fajo de billetes. Aquello acabó en drama, con Mario, que así se llamaba el joven, perdiendo 5.000 euros. La sal y el azúcar tuvieron la culpa.
La gente fue muy cruel con la malagueña, que fue vilipendiada en redes. De hecho, se llegó a traspasar los límites: "Llegué a tener una amenaza de muerte en mi propia casa", llegó a decir en una entrevista. Pues bien, la presentadora regresó este domingo a la televisión en la sección de Cuarto Milenio, Populares del misterio. Remedios Cervantes acudió al programa de Iker Jiménez para contar el suceso paranormal que vivió cuando era niña.
"Yo tenía nueve años y en Málaga hubo un avistamiento OVNI", aseguró la modelo. "Yo tuve la oportunidad de verlo, por lo menos de ver con toda la pandilla de amigas que tenía algo que brillaba en el cielo", prosiguió recordando que, al día siguiente, la prensa recogió que se trataba de "un objeto no identificado".
"Siempre me he preguntado por qué tenemos que pensar que somos los únicos que vamos a estar en este universo", reflexionó Cervantes, que no dudó en responder de formar positiva cuando le preguntaron si cree que existe vida en otro planeta.
Lo cierto es que Remedios y el misterio casi van de la mano. "La vida sigue siendo un gran misterio", dijo al comenzar la entrevista realizada sobre el escenario de un teatro. En ella, fue sincera a la hora de reconocer que cree que hay vida más allá de la muerte. "Soy una persona de fe y estoy convencida de que aquí venimos para aprender a ser mejores y poder ir a una vida mucho mejor".
Y lo dice porque la presentador también vivió otro extraño suceso. "Tengo un vídeo a los pocos meses de morir mi madre, en un cumpleaños. De repente, en una grabación de un teléfono aparecía como una especie de bola, como si fuese una especie de nube, muy curioso porque cuando pasaba además por delante de un rostro, ese rostro se veía en blanco y negro".