La polémica del final entre el Valencia y el Real Madrid va a ser uno de los temas de la semana. El nombre de Gil Manzano está siendo lo más comentado tanto en redes como en otros foros. El árbitro pitó el final del partido justo antes de que Jude Bellingham rematase un centro de Brahim Díaz, lo que les hubiera dado la victoria a los merengues. Una sonora indignación tanto por parte de los hinchas como del centrocampista británico, al cual le impuso la tarjeta roja.
Dado lo comentado que ha sido lo de Gil Manzano, hasta el punto de considerarlo un auténtico “robo” y un escándalo, han surgido los inevitables memes. Entre ellos, uno de los más virales está relacionado con la mítica Campeones: Oliver y Benji, la serie de animación basada en el manga Captain Tsubasa de Yôichi Takahashi. La secuencia recuerda a lo que se ha vivido este pasado sábado 2 de marzo en el Mestalla.
En ella, el guardameta Ed Warner ve cómo un tiro de Oliver Atom impacta muy cerca de la portería, viendo cómo se le había escapado el balón. Justo en el momento decisivo en el que se ve si éste entre o no, el árbitro pita el final del partido, marcando finalmente un gol. A pesar de ello, el colegiado lo anula. Una situación tremendamente similar a la que ha vivido justo el Real Madrid.
Una situación que ha dejado perplejo al mismísimo Carlo Ancelotti, entrenador del equipo blanco. “Esto es algo inédito”, expresó tras el final. Lo que sucedió en la última jugada del encuentro va a comentarse durante mucho tiempo. Con 2-2 en el marcador y después de haber equilibrado dos goles en contra, el Real Madrid apretó una vez más hasta el último segundo creyendo en sus oportunidades, algo que tantas veces ha hecho a lo largo de su historia, como ha podido verse en otros encuentros.
Aparte de que el gol no subiera al marcador, esta acción tan polémica tuvo una doble factura para el equipo merengue. Gil Manzano además expulsó a Bellingham, el autor del punto que no subió al marcador, ya con el partido concluido por las protestas. Se espera que el jugador se pierda al menos los próximos dos encuentros.
El árbitro justificaba su decisión en el acta del partido. “Tras la finalización del partido y aún en el terreno de juego, se dirigió hacia mí corriendo y en actitud agresiva y a gritos, repitiendo en varias ocasiones: 'It's a fucking goal'”, justificó el colegiado.