La vida actual de Chelo Vivares: de ser Espinete en 'Barrio Sésamo' a volcarse en el teatro con Lorca y Chéjov

En el programa Y ahora, Sonsoles la nostalgia tiene un valor muy importante, y a menudo recuperan a actores que en el pasado tuvieron una gran popularidad, pero que, con el paso de los años, se les fue perdiendo la pista. Paloma Hurtado o Enrique Espinosa (el niño de los anuncios de “hola, soy Edu, feliz Navidad”) son algunas de las celebridades que han pasado por el programa en las últimas semanas, y ayer se sumó a esta lista Chelo Vivares, una artista de larga trayectoria como actriz de teatro y de doblaje, pero cuyo papel más querido y recordado es el del erizo Espinete, de Barrio Sésamo.

Chelo Vivares nació en Guadalajara en 1952, y antes de cumplir los 20 años ya había comenzado a trabajar en el mundo de la interpretación, tocando palos como el doblaje, el teatro, la radio y la publicidad. En el ámbito personal, se casó con Juan Ramón Sánchez, conocido también por Barrio Sésamo, donde encarnó a Chema, el panadero. Un actor que falleció en 2008, a los 51 años.

“No se va, de alguna manera sigue. No sé cómo, no nos vemos, pero lo sentimos. A cualquiera nos pasa, cuando hemos tenido una pérdida así, y Juan sigue estando aquí”, explicaba Chelo Vivares en el plató de Antena 3, en referencia a su difunto marido. Un amor que comenzó antes de que ambos fuesen compañeros en Barrio Sésamo. “Yo no le animé, él se presentó al casting por su cuenta”, recordaba sobre la conocida serie infantil en la que trabajaron mano a mano.

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Tras Barrio Sésamo, Chelo y Juan Ramón continuaron trabajando juntos encarnando a los conocidos personajes de Espinete y Chema. “Formamos una compañía, adquirimos los derechos, y estuvimos haciendo una función con Nicolás Romero, que era Poquito de los Chiripitifláuticos, e íbamos por ahí”, detallaba la invitada. Sobre su trabajo en Barrio Sésamo, apuntaba que “no me saltaba nunca los guiones, pero había cosas que yo decía: es que un niño no hablaría así, nunca”.

En los últimos años, Chelo ha trabajado en producciones como Hermana Muerte, precuela de la cinta de terror Verónica, o la también película de género Tin y Tina. “Voy a seguir trabajando”, detallaba en Y ahora, Sonsoles, y se va a centrar en el teatro.

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“Estamos en Tribueñe con teatro de repertorio. Estamos con La casa de Bernarda Alba, que hago a Poncia. Estamos con Las Teodoras, que es un monólogo de Hugo Pérez de la pica que es un monólogo un homenaje a todas las cómicas, desde mi mamá, por ejemplo, mis padres eran actores. Estamos con Chéjov, y estamos con estamos con una obra maravillosa que iremos a Italia en marzo que se llama Deje que el viento hable”, enumeró la actriz, dejando claro que tiene muchos proyectos entre manos.