Crítica: 'Big Sky', el nuevo thriller de David E. Kelley no convence en su estreno en Star de Disney+
La nueva serie del creador de 'Big Little Lies' y 'The Undoing' acaba de llegar a España, pero en sus primeros tres episodios no demuestra tener lo que hace falta para destacar entre la gran oferta de series de la que disponemos.
Noticias relacionadas
- Star: las 10 series y películas exclusivas ideales para empezar a ver el nuevo canal adulto de Disney+
- Disney+ y Star anuncian diez nuevos documentales y series de producción propia para el mercado europeo
- 'Bruja Escarlata y Visión': quién es Agnes y otras revelaciones del episodio 7 de la serie de Disney+
David E. Kelley volvió a los titulares con Big Little Lies y The Undoing, ambas series de HBO, pero su carrera la forjó en la televisión en abierto, con series muy recordadas como Chicago Hope, Ally McBeal o Boston Legal. Big Sky, original de ABC que acaba de llegar a Star (Disney+), marca el regreso de este creador a las series generalistas, un hecho que podría haber tenido cierta relevancia si no fuera tan fallido.
Big Sky es un thriller policiaco en el que unos detectives privados, interpretados por Ryan Phillippe, Katheryn Winnick (Vikingos) y Kylie Bunbury (Un nuevo mundo) interpretan a unos detectives privados que investigando la desaparición de dos chicas adolescentes descubren que este no es un caso aislado. La premisa no es original ni especialmente, pero ese es el menor de sus problemas.
El personaje de Phillipe es el vértice sin sal de un triángulo romántico en el que vemos cómo se desperdician dos muy buenas actrices que giran desdibujadas a su alrededor. En los tres primeros episodios lo único que realmente sabemos de ellas es revelado en función de la relación que mantienen o no con él, y la vergonzosa dinámica que se establece entre las detectives es propia de la ficción de los 90, no de 2021.
Por el abanico de clichés narrativos y estilísticos de los que hace uso, entre ellos la literalidad de los "personajes femeninos fuertes", con pelea a puñetazos en un bar incluida, da la impresión de que en el regreso a los canales de televisión que le dieron fama, Kelley también viajó en el tiempo. Y si hace falta otro ejemplo de esto que estoy diciendo, solo hay que recordar el montaje, la música y la puesta en escena de la escena de sexo del episodio de estreno.
Al final de ese primer capítulo ocurre algo inesperado, y es justo reconocer que es un buen golpe de efecto que quizá sirva de aliciente para que el espectador continúe viendo la serie, pero por lo demás, Big Sky es un thriller convencional con villanos sin matices que se antoja un poco caduco para los tiempos que corren.
'Big Sky' está disponible en Star de Disney+.
También te puede interesar...