Un inexistente organismo independiente que regule la televisión en España
La demanda que Mediaset ha recibido esta semana por parte de la CNMC, acusando de emitir una cinta para mayores de 18 años en la tarde del fin de semana de Cuatro, deja en entredicho el poder que tiene Competencia para formalizar una demanda por una opinión interna. El organismo no se basa ni siquiera en la calificación que hace el Ministerio de Cultura, al que elimina de la ecuación cuando un medio de comunicación se le pone entre ceja y ceja.
Esta semana se conocía la demanda que Mediaset recibía por emitir American Playboy. Según Competencia, esta cinta debe estar considerada para mayores de 18 años, por lo que no podía ser emitida en el horario en el que se pasó por televisión. Sin embargo, el ICAA, dependiente de Cultura, califica dicha película como no recomendada para menores de 13 años, por lo que sí podría ser emitida en dicho horario.
Para Competencia, lo que diga el ICAA, que califica cintas emitidas en la gran pantalla y DVDs, sólo es algo orientativo y podrá ejercer su derecho a multar a una cadena siguiendo su propio criterio. ¿Por qué no existe un organismo que regule directamente lo que se emite en televisión?
En 2010 se aprobó la Ley de Comunicación Audiovisual, que asumía la creación del Consejo Estatal de Medios Audioviuales, un organismo regulador independiente del Gobierno que tendría como competencia judicializar los contenidos audiovisuales. Sin embargo, con la llegada del nuevo Gobierno, en 2012 se hizo una reforma de la Ley y se derogó la creación de este consejo. Fue entonces cuando se le dió todo el poder a la CNMC.
La opinión de los expertos
La CNMC tiene dos consejos, uno para Mercados y otro para Competencia, el que regula los contenidos audiovisuales. Este consejo se viene elegido a través de un real decreto. Un mecanismo de nombramiento que emana del Parlamento y que si, como es el caso, existe una mayoría absoluta asegura el control de los medios de comunicación por parte del Gobierno. “Nosotros no dependemos del Gobierno. Somos de lo más independientes”, aseguran a este diario desde la CNMC.
Sin esta independencia, la Comisión podría utilizar todo su poder para atacar a los programas con más éxito de una cadena de televisión y así frenar la crítica política. Este es el mensaje que se defiende, por ejemplo, desde Sálvame, programa que ha recibido una llamada de atención por parte de Competencia por no cumplir el horario de protección reforzada.
Puestos en contacto con el Consejo Audiovisual Andaluz (CAA), la presidenta Emelina Fernández asegura que "lo deseable sería que tuviéramos un consejo estatal de medios audiovisuales como los que existen en otros países europeos de nuestro entorno que tanga asumudas las competencias de regulación, sanción y otorgamiento de licencias".
La presidenta andaluza asegura que "en este momento tenemos a la Comisión Nacional de Mercados y la Competencia (CNMC) que tiene asumidas esas partes de esas competencias y que está actuando, además con especial incidencia en la protección de los menores. Nosotros, de hecho, desde el CAA mantenemos con ellos una línea de cooperación en varios asuntos. Si bien, lo deseable sería que existiera en España un organismo equiparable al resto de países europeos".
En Bluper también nos hemos puesto en contacto con el Consejo del Audiovisual en Cataluña (CAC), cuyo presidente Roger Loppacher ha querido declarar que "constatamos que la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia es un macroregulador que tiene determinadas funciones y que, desde el punto de vista audiovisual, quizá sería recomendable aumentarlas, especialmente en lo que se refiere a licencias. Por otra parte, hay que subrayar que el CAC mantiene líneas de colaboración con la CNMC", asegura el presidente del Consejo.