Todo está listo para que el próximo lunes se produzca en Atresmedia el gran evento de la campaña electoral para el 20 de diciembre. Soraya Sáenz de Santamaría, Pedro Sánchez, Pablo Iglesias y Albert Rivera participarán en un debate sin precedentes en laSexta y Antena 3 que estará moderado por Ana Pastor y Vicente Vallés con la ayuda de Esther Vaquero desde una sala especial donde se contabilizará el tiempo de cada intervención.

La intención de todas las partes es que sea un debate moderno de verdad, sin corsés. Para ello las normas son mucho más flexibles que en otras ocasiones, e incluso es novedoso que sean dos en lugar de uno los árbitros del encuentro.

¿Por qué va a ser "decisivo" como aseguráis que será?

Ana Pastor: Es la primera vez que vamos a ver debatiendo con el Gobierno y el PSOE a dos fuerzas extraparlamentarias pero que tienen tanto peso en la sociedad, e incluso poder político desde las municipales y autonómicas. Esto es inédito en España, más allá del formato o del papel que podamos tener los moderadores. Sería impensable hace unos años, pero el mismo CIS que acaba de salir lo dice: van a tener mucho peso a partir de ahora.

Queríamos al Presidente, pero queremos que el Gobierno reciba y defienda críticas de su gestión. El atril vacío no era una opción por eso

Han aceptado sin saber las normas, pero Mariano Rajoy también ha rechazado sin conocerlas. ¿Qué opinión os merece que haya sacado tiempo para otros formatos pero no para éste?

AP: Siempre me gusta la gente en general, y los políticos y periodistas en particular, que piensen que el que le escucha es al menos igual de inteligente o más que él. Eso es lo que dice el Gobierno y de la gente son las conclusiones. Hemos invitado a Rajoy, Rajoy no va a estar en el debate. Que la gente decida si eso debe tener un coste o no. Para nosotros era muy importante que el Gobierno estuviera. Queríamos al Presidente, pero queremos que el Gobierno reciba y defienda críticas de su gestión. El atril vacío no era una opción por eso.

Quizá en las siguientes elecciones se vean obligados por la gente a hacer muchos más debates con muchas más formaciones

Carlos Herrera afirmaba que si Rajoy hubiera acudido hubieran sido tres contra él. ¿Entendéis esa posición?

AP: Podemos hacer miles de interpretaciones y la gente tiene que decidir. Lo maravilloso es que se siente un precedente no solo en el formato sino que cada vez tenga que haber más debates. Estamos acostumbrados al cara a cara. Quizá en las siguientes elecciones se vean obligados por la gente a hacer muchos más debates con muchas más formaciones, que es muy sano. Quizá España se empiece a parecer a algunos países europeos que admiramos.

Es una responsabilidad para vosotros. ¿Cómo estáis preparando esas preguntas?

Vicente Vallés: Estamos trabajando de dos maneras: parcialmente por separado y parcialmente juntos poniendo en común todo. Hay muchas cosas que van a ir surgiendo: ideas sobre los temas que hay que plantear, sobre la forma, decidir qué tipo de preguntas son más importante para candidato... Y si planteamos un tema a un candidato no impide que los demás no puedan opinar.

La agilidad se va a producir no solo porque la propiciemos sino porque ellos están preparados

El reto es que sea más ameno y menos encorsetado...

VV: Lo vamos a intentar, pero eso va a depender mucho de ellos. Nosotros vamos a estar de árbitros, pero ellos tienen el protagonismo. El otro día en El País era un debate muy vivo, y eso se va a revivir. La agilidad se va a producir no solo porque la propiciemos sino porque ellos están preparados.

¿Creéis que pueden venir con el guion aprendido y no salirse de él?

VV: Si alguien va a venir con esa intención seguramente no irá a su favor. Eso se nota.

¿Cómo va a funcionar la sala del tiempo?

Esther Vaquero: Habrá cuatro periodistas que ya hemos seleccionado cada uno de ellos midiendo la intervención de cada candidato. Así Ana y Vicente podrán equilibrar, saber por dónde van los tiros... y podemos darles ese dato. Si en un momento dado hay que cortar a alguien porque lleva mucho tiempo hablando, y seguramente sea el que más se queje, se pueda reconducir el debate.

Habrá una cámara muda que seguirá a los candidatos en su camino al debate. ¿No sería más interesante que tuviera sonido?

AP: Tienen una agenda infernal y una exposición de cualquier error que magnificamos. Esos minutos previos tienes que estar concentrado y ya es bastante poder poner una cámara en el coche. Lo único parecido que hemos visto es el día del cara a cara de Salvados. Veremos de dónde viene y cómo vienen, y eso tiene gracia. Incluso de manera gestual va a haber mucha información no verbal.

¿Cómo estáis organizando vuestra agenda preparando el debate y además con vuestros programas habituales?

AP: Sufro de empatía. Esther se pega unos madrugones que yo recuerdo con horror y sufro por ella. Yo soy la que mejor lo tiene...

VV: Tú tienes dos debates...

AP: Sí, en menos de 24 horas. Tenemos un debate económico el domingo en El objetivo en el que estará Alberto Garzón. Pero también me sirve para recordar propuestas económicas. Y ellos [Vicente Vallés y Esther Vaquero] llevan un diario encima.

¿También para vosotros va a ser un momento histórico en vuestra carrera?

AP: Solo quiero trascender en la vida con mis hijos. Ni siquiera nos vemos cuando salimos en televisión, no nos escuchamos. Lo que queremos es hacerlo bien.

VV: Es una responsabilidad, asumimos que lo es. Queremos que salga bien y lo vivimos con ese grado. Hacemos un programa todos los días y tenemos esa responsabilidad todos los días. Este es un programa distinto, tiene un plus de importancia por lo que supone. Lo que también sabemos es que el protagonismo es de los candidatos.