Bertín Osborne se sentó este miércoles en la casa de Íker Casillas y Sara Carbonero en Oporto en su entrevista para En la tuya o en la mía. El crooner charló de todos los puntos amables y polémicos con el portero, e incluso tocó uno que pareció incomodar a su interlocutor: su enfrentamiento con José Mourinho.
Casillas reconoció que en el último año en que el portugués fue entrenador del Real Madrid no habló apenas con él. Fue entonces cuando su relación con el club blanco comenzó a "viciarse", algo que terminó por explotar el pasado verano cuando decidió abandonar con rumbo a Oporto.
El portero ha querido explicar de dónde vino esta mala relación y se ha remontado al año 2013. Ya en la temporada anterior comenzaron las fricciones, pero fue a finales de ese año cuando el portugués decidió mantenerle en el banquillo. Además, el Real Madrid pasaba por un momento difícil en su relación con el FC Barcelona y a Mourinho no le sentó bien que hablara con algunos de los jugadores contrarios a los que conocía a fondo en la Selección Española.
A partir de ahí, el entrenador decidió apostar primero por Adán y más tarde por Diego López. "Habrá opiniones, pero en ese momento no podía decir nada", asegura. "Decían que jugaba por decreto y luego llegó mi lesión".
Sara Carbonero entró en acción
Pero hubo lugar a otros momentos mucho más alegres en la entrevista. Sara Carbonero estuvo presente para hablar con Bertín Osborne mientras su pareja y el presentador preparaban unos huevos fritos con patatas.
Sara Carbonero lo pasó mal durante el Mundial de Sudáfrica por las críticas que recibía
Fue ese momento cuando Casillas aprovechó para explicar el famoso beso tras ganar el Mundial de Sudáfrica. "Lo había pasado mal durante toda la competición por las críticas que recibía", asegura el portero. "El beso era el broche. Ella no lo sabía ni lo esperaba".
También desvelaron algo que nunca se había dicho hasta ahora. Los aplausos de fondo que se oían en el vídeo pertenecían a Felipe y Letizia, entonces Príncipes de Asturias y ahora Reyes de España.
"Con el beso engañó a toda España", aseguraba bromeando Carbonero. "No es tan perfecto como parece, pero ya le tenemos cariño".