Gran Hermano VIP llega esta noche a su fin tras casi 100 días de concurso, veinte más que en la exitosa edición anterior en la que se proclamó vencedora Belén Esteban. Al final de la noche sólo uno se hará con el maletín: Carlos Lozano y Laura Matamoros. No obstante, ambos ya han ganado con su participación: el presentador ha conseguido que Mediaset España le confíe un nuevo formato, mientras que Matamoros ha alcanzado la fama por algo más que ser la hija de.

Pero, ¿quién merece realmente ganar esta edición? Yo lo tengo claro: Carlos Lozano, sin ninguna duda. Aquí las cinco razones por las que el otrora modelo se merece la victoria.

1. Carlos Lozano es el único VIP

Mal que le pese a muchos, Carlos Lozano es el único VIP de esta edición. No se nos puede olvidar que el madrileño fue el presentador de Operación Triunfo, uno de los programas más exitosos de nuestra televisión. Lozano, su cruza la pasarela y sus chicos conseguían atraer cada semana de media a un 44,2%, más de lo que ha conseguido esta edición. En su currículum también figuran La ruleta de la fortuna, El precio justo, Eurojunior y hasta un cameo en la oscarizada Todo sobre mi madre.

2. El perfecto concursante

Lozano ha sido el concursante perfecto, estratega y con ambición. Con muchas mayores tablas en televisión que sus compañeros, el presentador definió muy pronto su estrategia en la casa: no iba a ser un mueble más de la casa. A Gran Hermano se va a concursar. Y eso Lozano lo llevaba grabado a fuego… aunque eso fuera enfrentarse a las grandes favoritas Rosa Benito y Raquel Bollo.

3. Generador de vídeos

De ahí que el presentador haya sido sin ninguna duda el concursante que más vídeos y contenido ha generado para el programa. Se ha enfrentado a toda la casa, ha provocado broncas cuando sabía que había galas en directo, ha sabido pedir perdón cuando tocaba, ha ejercido en muchas ocasiones de periodista para sacar temas a sus compañeros que luego sabía que generarían titulares fuera -los gustos sexuales de Rappel, por ejemplo-. En definitiva, Carlos Lozano ha mantenido viva esta edición.

4. Castigo a los ni-ni

Carlos Lozano merece ganar para avergonzar a aquellos que piensan que se puede obtener la fama y el dinero simplemente con ser hijo de o concursando en un programa de televisión. No olvidemos que Laura Matamoros entró en la casa única y exclusivamente por ser la hija de y por su enfrentamiento con su hermanastro Javier Tudela. De hecho hasta que no entró su padre en la casa, Matamoros no dejó de hablar del joven hasta rozar lo cansino. El presentador, sin embargo, no ha dudado en rebajarse a ser concursante para conseguir su objetivo de volver a España para presentar un formato.

Como ya dijo Mercedes Milá, Laura tiene un futuro por delante “que tiene que trabajarse”. Y no a costa de su padre, ni de su apellido. Que gane GH VIP es darle alas para seguir viviendo del cuento.

5. La derrota de Sálvame

"¿Tú que te crees, que Paolo [Vasile] va a decir que me echen?". Con esas palabras, Belén Esteban dejaba claro el pasado año que Mediaset España no se iba a quedar quieta al ver que uno de los bastiones del programa y del grupo audiovisual podía tener un pie en la calle y poner en peligro las audiencias del programa. Y así fue. La de San Blas se salvó de la expulsión por sorpresa en la semifinal y finalmente ganó el programa.

Este año, Sálvame claramente está apoyando a la hija de Kiko Matamoros. Es el momento de la venganza de aquellos espectadores que se enfadaron por la victoria de Belén Esteban gracias a la campaña sin precedentes de su programa.