Los productores de cine entierran el hacha de guerra contra las teles
Cambio radical en la actitud de los productores del cine español con las televisiones. Si hace un año el presidente de la Federación de Productores Audiovisuales (FAPAE), Ramón Colom, atacaba a las televisiones privadas por no estar conforme con su papel en el sector, este año le ha tendido la mano y le ha dado las gracias por ayudar al cine español a conseguir los datos cosechados en lo que llevamos de 2016.
Hay que recordar que hace apenas un mes el Tribunal Constitucional validaba la obligación de las cadenas de televisión de invertir el 5 % de sus ingresos en la producción de cine español y europeo y FAPAE mostraba su "entera disposición para entablar conversionacions con los actores del sector implicados".
"Hay que agradecer a Telecinco Cinema, a Atresmedia Cine, a TVE y a las televisiones autonómicas su trabajo por el cine español. Gracias a su trabajo conjunto con productores, guionistas, actores... salen adelante las películas", dijo Colom este lunes durante la tradicional rueda de prensa de la organización en el marco del Festival de Málaga.
Colom dejaba entrever así, no obstante, que el éxito de las películas producidas por las televisiones también es posible gracias a la contribución de productoras independientes. Por ejemplo, Ocho apellidos vascos cuenta entre sus productores a La Zona Films, La imposible a Apaches Entertainment, o La isla mínima a Atípica Films.
A fecha del 18 de abril la cuota del cine español en salas es de un 19,3 %, cifra similar a la que se logró en todo 2015 y casi diez puntos superior al dato del año pasado en el mismo período, que fue del 10,6%. En el top ten de las cintas que han ayudado a ello, todas de las televisiones: Palmeras en la nieve, Cien años de perdón, Kiki, el amor se hace, Ocho apellidos catalanes o El pregón.
Asimismo, los cinco largometrajes españoles que superaron el millón de espectadores en 2015 también fueron producidos por las teles: Ocho apellidos catalanes, Atrapa la bandera, Perdiendo el norte, Regresión y Ahora o nunca.
Los derechos del fútbol
Ahora el enemigo es otro: el fútbol. "Hay una necesidad imperiosa de ajustar los costes a los deportes, en especial al fútbol. El cine y la televisión están pagando los excesos del fútbol. Se lleva el dinero que debería estar financiando al cine".
"El cine y la televisión deben regirse por las lógicas económicas de la industria del audiovisual, no por la lógica financiera; los incrementos de coste no deben ir a cubrir los beneficios de las entidades que lo financian", afirmó Colom.