Aunque no hace falta pinchar mucho para que Gran Hermano 17 se convierta en un campo de batalla, parece que los concursantes le han cogido gusto a eso de discutir y ya se buscan sus propios juegos peligrosos. Este lunes, Bárbara y Adara han decidido que era el turno de hacer estallar a Clara.

Las dos concursantes han decidido jugar con la comida, algo que está casi prohibido en Gran Hermano si no te quieres ganar enemigos. Adara y Bárbara han cogido el bote de nocilla a escondidas, han comido sin compartir y después han dejado los restos en la cama de Clara. 

Ambas han querido que Clara se encuentre el desaguisado en su cama y que así piense que alguien ha estado comiendo en su cama. No se quedaron ahí y destrozaron algunas galletas en el suelo para que su compañera de concurso saltase y mostrase su ira al resto de los concursantes.

No tardó en ver lo que sus dos compañeras habían hecho en la habitación. Clara fue preguntando por toda la casa quién había sido, pero nadie contestó. En el salón, Adara y Bárbara se reían de la trastada mientras Clara hablaba incluso con las cámaras.