Poco había que ver este miércoles en televisión más allá de los especiales informativos de algunas cadenas para informar del desfile de la Fiesta Nacional. Este 12 de octubre, la mayoría de las cadena se lo toman libre y dejan vía libre a TVE, la cadena que más apuesta por el Día de la Hispanidad. TV3, la autonómica catalana, también cogía vacaciones. Pero este martes, un día antes, no dudaba en plantar la semilla en su programa. 

La pública catalana emitió este martes Els Matins, el programa magazine que ocupa las mañanas de lunes a viernes de TV3. Un espacio en el que hay tertulia política, análisis de la actualidad y entrevistas con personajes de referencia. Un día antes del Día de la Hispanidad, el programa mantuvo un debate sobre si esta fiesta debe celebrarse o no.

Para ilustrar este debate, el programa matinal invitaba al periodista Francesc Puigpelat, escritor del libro Breu hisòria del nacionalisme espanyol. Una publicación en la que se habla de cómo combatir el nacionalismo español. 

Durante su intevención en el programa de la autonómica, el escritor ha explicado a la audiencia cómo se debe hacer frente al nacionalismo. Primero, según Puigpelat, hay que entender muy bien lo que es el nacionalismo para poder combatirlo. De lo contrario "estaríamos combatiendo a ciegas", señaló el escritor en el programa. 

TV3 toma posición ante la Fiesta Nacional, ya que hace apenas un año, en septiembre de 2015, le cerraba las puertas a Josep Borrell cuando presentaba un libro en el que criticaba el independentismo. A pesar de que la pública se defendió argumentando que se trataba de un problema de agenda, el político siempre dijo que se trataba de un problema ideológico.

Els Matins siempre ha estado en el ojo del huracán, siendo uno de los espacios de la pública catalana que más se deja llevar por la opinión a la hora de informar a los espectadores. El pasado mes de abril, la presentadora del programa Empar Moliner quemaba la Constitución en directo y delante de las cámaras en una de sus intervenciones. Este vídeo se convirtió en debate nacional y dejó muy clara la ideología de una cadena de televisión que, a pesar de su estatus público, siempre ha demostrado por dónde cojea.