Después de que ya el pasado año tras su victoria en Eurovisión Salvador Sobral dijera que su triunfo venía a demostrar que "la música no son fuegos artificiales, sino sentimientos", este año ha continuado con su discurso atacando la propuesta de Israel. 

"Youtube me obligó a verla. Cosas de la tecnología. De repente, Youtube pensó que me gustaría la canción de Israel, y entonces abrí aquello y salió de ahí una canción horrible. Pensé: Youtube, muchas gracias, pero no es esto", comentó Sobral. Y agregó: "Afortunadamente, este año no tengo que oír nada".

Una crítica que no se ha quedado sin ser contestada por la representante israelí Netta, que ha subido una foto a Twitter junto a la otra gran favorita, la representante de Chipre, Elena Foureira, en la que forman un corazón con sus manos. "Mandando sólo amor a Salvador y a todos los artistas de todos los géneros".

Sobral, que prepara una actuación en la gala final del sábado junto al brasileño Caetano Veloso, se mostró también escéptico sobre el efecto que su victoria, basada en una apuesta intimista y simple, pueda haber tenido para cambiar la esencia de Eurovisión, repleta de efectos y que gusta de puestas en escena espectaculares. "No creo que haya cambiado algo. El año pasado las personas decían: '¡ahora que ganaste, esto va a cambiar!' No creo. Tal vez en el futuro", sostuvo.