Màxim Huerta: "Yo era fácil de ridiculizar, por maricón, por venir de la tele"
El periodista habla de cómo vivió su dimisión como Ministro de Cultura sólo seis días después de ser nombrado.
5 abril, 2019 11:02Diez meses después de haber sido nombrado Ministro de Cultura y Deportes y tras haber dimitido sólo seis días después, lo que le convirtió en el ministro más breve de la democracia, Màxim Huerta se ha sincerado en una entrevista en la que habla del "duelo" por el que ha pasado en este tiempo y confiesa que lloró en más de una ocasión.
"Me quedé solo en el despacho, y sí que lloré. Estaba roto. El momento de soledad ahí, a puerta cerrada, fue fuerte. Llegó un amigo para ayudarme a recoger los trastos, las fotos de mis padres y mis sobrinas. Y para mi madre creo que fue un alivio", confiesa a ICON.
Tras aquello prefirió guardar silencio, a pesar de las ofertas que le hicieron. "Me ofrecieron colaboraciones fijas si daba una entrevista, temporadas completas en algunos programas a cambio de hablar, pero preferí el silencio. No quería que de mí saliera ni una sola frase con rabia. En un país que echa fuego, lo último que quería yo era regalar titulares".
“Cuando salió lo de Pedro Duque tuve una crisis muy gorda. Vi la diferencia de trato, tanto de los medios como del Gobierno. Y fui consciente de que debía seguir callado y secando la herida. Había cerrado en falso, el dolor estaba vivo”, añade.
En este sentido, Huerta también critica los prejuicios con los que se trató su nombramiento. "Desde las televisiones que van de progresistas y maestras del periodismo trataron mi nombramiento con un fondo de burla. Y no tan fondo. Me di cuenta de que para algunos era un intruso. No soy gilipollas, soy mayor y tengo años, y hubo recochineo".
Y añade. "Con la distancia desde la que lo veo ahora, me da incluso ternura: yo era fácil de ridiculizar, por maricón, por venir de la tele, por asuntos varios, como mis tuits cogidos con pinzas donde se interpretó que odiaba el deporte."