Año y medio después de anunciar que sus series pasarían a tener una duración de 50 minutos por episodio para adaptarse al formato internacional, Atresmedia pone hoy fin con el desenlace de Toy Boy a la última de sus ficciones de 70 minutos.
Lo hará de forma agridulce por los pobres datos cosechados (8,4% y 1.137.000 espectadores de media) y con la duda de si la nueva duración de sus series hubiera beneficiado al producto.
Y es que, como ya analizamos en nuestra crítica del primer episodio, el metraje de la ficción iba completamente en contra de la misma, con un espectador que terminaba hastiado al ver que le faltaba agilidad a la trama.
Sin embargo, el problema con el que se encontró la cadena y la productora era que los guiones de la ficción estaban ya tan avanzados que, económicamente, no era rentable adaptarla a la nueva duración de 50 minutos.
Habrá que ver ahora qué tal funciona en su paso por las plataformas de streaming ya que Toy Boy tiene un tufo a series como Ingobernable o Dilema que tanto gustan en Netflix.
La crisis de la ficción en abierto
Sea como fuere, Toy Boy vuelve a poner en evidencia el actual periodo de crisis que atraviesa nuestra ficción, lo que ha quedado demostrado en el hecho de que ninguna de las series estrenadas en 2019 por las cadenas privadas haya conseguido triunfar.
El caso de Atresmedia es aún más preocupante ya que el dato conseguido por Toy Boy es el segundo mejor cosechado por una de sus ficciones en este año que acaba y sólo superado por Matadero, que promedió un 12,1% y 1.770.000 espectadores.
Pequeñas coincidencias, que ya venía de emitirse en Amazon Prime Video, anotó un 9,9% y 1.011.000 espectadores, mientras que 45 Revoluciones fue un absoluto fracaso con un 4,2% y 630.000 espectadores.
¿Dónde está el futuro?
Estos parecen que no han pasado desapercibidos para el grupo. Y es que, aunque hoy en día hay que tener muy en cuenta los datos en diferido y las ventas a terceros, la emisión en lineal sigue siendo de vital importancia para rentabilizar un proyecto.
De ahí que algunas de las series que tiene pendiente de estreno Atresmedia estén más enfocadas a un público más generalista, aunque sin perder el riesgo. Y así nos encontramos con que La valla rescata la exitosa fórmula de El Internado que mezclaba costumbrismo y ciencia ficción, o Perdida, el thriller más clásico.
También estrenarán en 2020 Benidorm, una comedia muy en la línea de Allí abajo, que tantas alegrías dio a la cadena y que contará con gran parte del equipo de aquella ficción.