Por qué Yiya debe llegar a la final de 'Supervivientes 2020'
La extremeña ha roto con el continuismo del que veníamos de 'GH VIP'
7 mayo, 2020 15:30Empieza la cuenta atrás. Supervivientes 2020 está prácticamente en la recta final del concurso ya que, según se le escapó a Antonio David Flores hace unos días, apenas quedarían por delante tres semanas de concurso. Cada vez son menos los concursantes que quedan en la isla y entre ellos está el ganador de esta edición.
Una de las candidatas potencias a alzarse con la victoria del concurso es Yiya. A la extremeña la conocimos por primera vez allá por mediados del año 2016 como una de las princesas que buscaban pareja en el programa de Cuatro, Un príncipe para tres princesas. En el dating show ya se dejó entrever el fuerte carácter de la joven pero, después de este programa, Yiya desapreció de la televisión y no fue hasta principios de este mismo año cuando, de manera sorpresiva, se anunciaba su fichaje como concursante de Supervivientes 2020.
La extremeña ha demostrado que no cambiará para gustar a nadie
Desde la primera gala de la edición, conocimos a una Yiya completamente nueva. Es más, antes de embarcarse en el avión hacia Honduras, la extremeña se enfrentó a Fani, por ejemplo. Todo pintaba que la concursante iba a ser una de las bombas de la edición. La periodista ya se perfilaba como el azote de sus compañeros y, desde estas mismas página, defendíamos que Yiya era la esperanza para romper con el continuismo del que veníamos con Rocío Flores, Antonio David Flores, Adara y demás personajes de los que llevábamos meses hablando.
Como era previsible, la extremeña fue nominada y expulsada en la primera semana. No obstante, el público decidió semana tras semana que se salvará, y poco a poco ha conseguido hacerse su hueco en la isla y llegar hasta este momento clave del concurso. Sin embargo, Yiya está nominada esta semana y la nominación pinta difícil ya que se enfrenta a personajes muy potentes.
Pero no es el momento. No es el momento de que Yiya sea expulsada tras llegar hasta aquí. Yiya es Yiya. Es tal cual es ella. Si te gusta bien y, si no, también. Ha demostrado que no cambiará para gustar a nadie, como dice ella, brilla con su propia luz, pero también se opaca por sí misma. Esta es una de las claves de la personalidad de Yiya. Aún sabiendo que a veces puede resultar políticamente incorrecta, ella vive el concurso sin engañar al espectador. Eso siempre lo hemos premiado en los realities y, esta vez, no debería ser una excepción.
También la extremeña es la antítesis de Avilés. Es cierto que el colaborador de Viva la vida ha movido mucho la isla y sus tramas, pero siempre forzando las discusiones con un papel muy impostado. Yiya también ha sido un revulsivo de tramas pero, por lo menos, lo ha sido cuando tocaba y de manera natural. Es decir, discute cuándo tiene que discutir.
La joven también ha demostrado ser un buena superviviente. Aunque es cierto que a veces ha pecado de ser poca participativa en algunas pruebas, en las que participa ha demostrado de sobras que vale para la supervivencia. Y sobre todo posee una de las cualidades más importantes de la concursante: no se aferra al concurso como si lo hacen otros compañeros. Si se tiene que ir, se va. Y eso también demuestra que no interpreta ningún papel para gustarle a nadie.
Sin duda, Yiya ha sido un soplo de aire fresco para el reality y es uno de los personajes que todo fan de la telerrealidad quería en los realities. Su perfil recuerda al de Sofía Suescun, ganadora de Supervivientes 2018. Ambas compaginaron la faceta de concursante y superviviente y, en el caso de la segunda, le salió bien. Yiya debe, por lo menos, llegar a la final.