Mediaset España ha vuelto a perder una oportunidad de oro para reconectar con la industria de la televisión. En los últimos años, el grupo de Fuencarral ha ido rompiendo lazos intentando sobrevivir por sí mismo sin la ayuda de nadie, pero esa ayuda en ocasiones la ha echado de menos en momentos de flaqueza.

Ocurrió cuando abandonó la Academia a finales de 2013. Paolo Vasile consideró que la actual dirección no le representaba y prefirió no seguir allí con una decisión que es la tercera vez que se toma desde la fundación de este órgano en 1997.

Mediaset España ha dado la espalda a la Academia de TV y al FesTVal con pocos meses de diferencia

Puede que tenga razón. Creo que tiene razón. La actual Academia de Televisión no es la que mejor está defendiendo los problemas de sus integrantes. Está anclada en el pasado. Pero, para cambiarlo, hay que hacerlo desde dentro y apoyando nuevas fuerzas en la dirección, no dejando que de nuevo Manuel Campo Vidal vuelva a ganar las elecciones sin competencia.

Mediaset España abandonó también el FesTVal

Poco después, sorprendió a todos con otra decisión de las mismas características. Mediaset España decidía en verano de 2014 no formar parte del FesTVal de Vitoria, uno de los pocos encuentros que el sector de la televisión tiene a su disposición.

La excusa inicial era por motivos estratégicos. Querían estrenar sus productos más cerca de las fechas de estreno y ahorrar dinero. Ahora, con la primera edición del FesTVal en Murcia, las fechas sí cuadraban, y de hecho se han convocado dos ruedas de prensa: Aquí Paz y después Gloria y La Voz; y se espera alguna más.

La excusa ahora sólo es económica. Tienen producto, pero no quieren enseñarlo ni trasladarse.  Y no quieren gastar un dinero que creen que invertirán mejor en Madrid presentando sus novedades en casa.

Lo que pierde Mediaset no involucrándose

Sin embargo, en este caso Mediaset no solo debería mirar el dinero. Una empresa con tantos trabajadores, que además cotiza en bolsa, no puede dejar de lado jamás los motivos económicos. Pero tampoco los de imagen.

También en esta ocasión tiene razones para quejarse porque la organización es, una vez más, muy caótica. Está empezando con solo seis ediciones a sus espaldas y hay cosas que pulir con el tiempo. En ocasiones, Mediaset se ha visto perjudicada, al igual que otras cadenas e incluso los medios, por una programación muy concentrada que incluso se ha solapado.

Mediaset pierde una oportunidad única de acercar posturas con el resto de la industria televisiva

Pero también para cambiar esto deben hacerlo desde dentro, no salirse y criticar desde fuera. Mediaset España pierde un encuentro con profesionales, con productoras, publicistas o periodistas. Una oportunidad única de convivir y acercar posturas con todos, de explicar de cerca su visión del sector.

No vale solo criticar y luego presumir de premios obtenidos en el FesTVal, como han hecho con El Príncipe. O incluso con los Premios Twitter que acaba de conseguir en Murcia y de los cuales ha mostrado su orgullo. Hay que venir, recoger el premio y apuntar a los problemas que hay que corregir entre todos.

Acudiendo, invirtiendo en la industria, la industria se lo devolverá cuando lo necesite. En diciembre del pasado año, se encontraban con un gran problema al recibir un ultimátum de la CNMC para Sálvame. Jorge Javier Vázquez apuntaba directamente a los que, como no se habían visto salpicados, no se querían mojar. Muchos estuvimos apoyándoles porque creímos injusto el trato de Competencia, pero quizá hubieran sido más los que se hubieran involucrado en su defensa si ellos hubieran estado más involucrados en la industria.

Si el cine tiene sus festivales, ¿por qué no la televisión? ¿Por qué uno de los dos grupos más grandes del sector en España no va a participar? ¿Acaso invertir en imagen no es un gasto rentabilizado? El FesTVal ganaría. Los medios ganaríamos. Y ellos también ganarían.