Dani Rovira ha vuelto a utilizar su sentido del humor para anunciar las últimas novedades sobre su estado de salud. Desde que le detectaron un linfoma de Hodgkin hace cuatro meses, el actor se ha mantenido fuerte y ha seguido siendo un ejemplo para todos, mostrando una actitud muy positiva ante una enfermedad tan complicada como el cáncer.

Tras estos meses tan duros, parece que el cómico trae buenas noticias para sus seguidores. Rovira ha publicado en su cuenta oficial de Instagram una foto en la muestra su felicidad al terminar con la quimio: "¡Se acabó la quimio! Ocho sesiones y cuatro meses entre pecho y espalda".

No obstante, el protagonista de Ocho apellidos vascos ha explicado que el tratamiento le ha dejado algunas secuelas: "pérdida de pelo, las venas de los brazos duras como bridas y cabeza de hipopótamo (de ésta última no me comentaron nada). Si a alguien más le ha pasado esto, que me escriba, con cuatro que seamos, organizamos un Tragabolas", bromea haciendo alusión a la careta con la que aparece en la imagen.

"Esta semana empiezo a afrontar 18 sesiones de RADIO, una cada día. Aunque los linfomas han desaparecido, los médicos lo han decidido así por cauterizar y precaución. A mediados de agosto, este mal sueño habrá acabado y podré retomar de nuevo “la normalidad” si es que hay algo normal ya en este mundo", explica el actor.

"Me queda la última pantalla del videojuego... Ojalá cuando acabe se me ponga cabeza de koala. Me gustan mucho los koalas", agrega con humor.

Además, Rovira ha querido aprovechar para agradecer todo el cariño que ha recibido durante estos meses: "Sois tantos los que me estáis curando... Ánimo a los que estáis en la lucha. Tenemos unos médicos y un personal sanitario espectacular en este país. El resto es quererse y dejarse querer", ha concluido.