Nuevo varapalo televisivo para Netflix: ¿Ganará antes el Emmy o el Oscar?

En Netflix se las prometían muy felices después de que en esta edición de los Premios Emmy 2020 se convirtieran en la compañía con más nominaciones con un total de 160, siendo Ozark la ficción más nombrada de la plataforma con un total de 18 candidaturas, entre los que se incluía la categoria de mejor serie de drama.

La compañía de Reed Hastings contaba con un total de 51 proyectos nominados -aunque pocos de ellos Originales-, más del doble que HBO, que había registrado este año 21 proyectos nominados, gracias a los cuales había obtenido 107 nominaciones.

Eso sí, HBO conseguía las series más nominadas gracias a las 26 candidaturas de Watchmen y las 18 de Succession, dos duros huesos de roer. Pero, además, por proyecto, HBO contaba con un media de 5 nominaciones, en comparación con las 3 de las series de Netflix.

En 2018, Netflix dió un vuelco histórico y arrebató por poco el trono de las nominaciones a HBO (112 frente a 108). Sin embargo, ambas empataron finalmente en victorias, con 23 cada una, pero yendo a parar el galardón de mejor serie de drama a la segunda gracias a Juego de tronos.

Ya en 2019, HBO recuperó el liderazgo de las nominaciones (137 frente a 117 de Netflix) y finalmente obtuvo más victorias (34 frente a 27) gracias, en gran parte, a la temporada final de Juego de tronos y a la sorpresa de Chernobyl, convertida en una de las series más aclamadas de los últimos años. 

El reinado de HBO

¿Qué pasaría este año? Pues, más de lo mismo. Impulsada por las aclamadas Watchmen y Succession, HBO ha sido la compañía más distinguida en estos Emmy con 30 premios, superando así a Netflix, que ha tenido que conformarse con 21 galardones.

Lo más amargo para la compañía, sin embargo, es que siete años después de lanzar su primera ficción (House of Cards), aún no ha conseguido alzarse con ningún galardón importante en estos premios. Ni la propia House of Cards, ni The Crown, ni Stranger Things, ni Ozark, ni Bodyguard.

Y eso que ha habido años como 2017 en los que consiguió colar hasta tres ficciones (The Crown, House of Cards, Stranger Things) en la categoría de mejor serie de drama. Finalmente el premio se lo llevó El Cuento de la Criada, de Hulu. Ya en 2018, con The Crown y Stranger Things nominadas, el galardón fue a parar a Juego de Tronos.

Tampoco le ha ido mejor en comedia, donde han sido nominadas Orange is the new black (2014), Unbreakable Kimmy Schmidt (2015, 2016, 2017, 2018), Master of none (2016, 2017), GLOW (2018) y Russian Doll (2019).

Este año, a pesar de contar nuevamente con tres candidaturas en mejor serie de drama (Ozark, The Crown, Stranger Things), en la categoría había auténticos titanes como Better Call Saul, El cuento de la criada, Killing Eve, The Mandalorian y Sucession, quién finalmente se ha llevado el galardón.

Mientras, en comedia, Dead to me y El método Kominsky no han podido hacer nada contra la triunfante Schitt's Creek, que se ha convertido en la primera ficción de comedia en conseguir todos los premios principales (comedia, actor, actriz, actor de reparto, actriz de reparto, guión, dirección).

El vacío de Hollywood

Este 'desprecio' por parte de la Academia de las Artes y Ciencias de la Televisión es equiparable al de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas. Y es que Netflix tampoco ha conseguido alzarse con el galardón a mejor película.

De hecho, su primera nominación a mejor película no llegaría hasta 2019, con Roma, del mexicano Alfonso Cuarón. En la compañía también se las prometían muy felices tras los numerosos galardones (León de Oro, Globos de Oro) que había obtenido la cinta.

Sin embargo, a pesar de que el filme ganó el premio a mejor película de habla no inglesa y los galardones de mejor director y mejor fotografía fueron a parar a Cuarón, el premio de mejor película iría finalmente para Green Book.

Más dura ha sido la derrota en este 2020. La compañía conseguía dos nominaciones a mejor película: El irlandés, de Martin Scorsese, e Historia de un matrimonio, de Nohay Baumbach y David Heyman. Sin embargo, el premio fue a parar a la aplaudida Parásitos. El premio de consolación sería el de Laura Dern como mejor actriz de reparto.