La patronal y los principales sindicatos de Castilla y León, CEOE-CyL, UGT y CCOO, coincidieron hoy en valorar las cláusulas subrogatorias en los convenios colectivos como “fuente de empleo fijo y de calidad” así como factor de “estabilidad”, si bien la confederación empresarial reveló sus “reservas” sobre esta figura legal por la “incertidumbre” que genera a los empleadores.
En ese sentido, el secretario general de CEOE-CyL, David Esteban, que sustituyó al presidente Santiago Aparicio en el foro por la ausencia de este último por motivos familiares, recordó que el empresario subrogado “debe hacerse responsable de todas las deudas” del subrogante, algo que genera “reservas” al empleador y a la patronal por las “responsabilidades salariales y ante la Seguridad Social” que se derivan de ello.
Además, Esteban también señaló que estas cláusulas condicionan la selección de la plantilla por parte del empresario entrante, lo que “limita la flexibilidad en la gestión por tener dentro del convenio la subrogación”.
Un elemento que, no obstante, fue valorado por Esteban por la “estabilidad” que aporta al “reducir la temporalidad en el empleo, fidelizar el talento, suplir la dificultad de encontrar personal adecuado, dotar de seguridad y certeza a trabajadores y empresarios, evitar que el cambio de proveedor sea reinicio constante de actividad y contribuir a la competitividad, la productividad y la paz social, muy necesaria en sectores como la seguridad, la limpieza o las centrales nucleares”, entre otros.
Coincidió con la valoración de estas ventajas el secretario de Acción Sindical, Coordinación y Diálogo Social de UGT en Castilla y León, Raúl Santa Eufemia, que acudió en sustitución del secretario general, Faustino Temprano, por la agenda interna de la organización, y que “garantiza la continuidad del empleo y de las condiciones laborales que venían disfrutando los trabajadores con la aplicación del mismo convenio colectivo”.
Dicha continuidad, no obstante, que “aparece clara en el Estatuto de los Trabajadores y en la Directiva Europea que protege sus derechos ante el traspaso de una empresa o el cambio en la titularidad, no parece tan fácil de aplicar en la vida laboral sin conflictividad” entre empresario y trabajadores, algo que “en muchos casos, acaba resolviéndose en los despachos”.
“En España, gracias a la negociación colectiva y a su fuerza vinculante, se pactó la subrogación como compromiso en la búsqueda simultánea del beneficio económico y de los derechos de las personas trabajadoras”, continuó explicando Santa Eufemia, que no obstante recordó que esto se puso en jaque con la reforma laboral de 2012 al “poner los convenios de la empresa por encima de los colectivos”, una “injusticia” frente a la que se recuperó “la normalidad” con la nueva reforma laboral por “otorgar al convenio colectivo la cima de la pirámide”.
Por último, el secretario de Políticas Públicas y Diálogo Social de CCOO, Saturnino Fernández de Pedro, que excusó la ausencia de Vicente Andrés por encontrarse en una asamblea sindical en El Bierzo, agradeció la invitación del CES para formar parte del debate y esperó sacar conclusiones sobre “la controversia entre la normativa de la Unión Europea y la española” en materia de cláusulas subrogatorias en los convenios colectivos.
Garantiza puestos de trabajo
Porque todo ello tuvo lugar durante la inauguración de una jornada dedicada a las cláusulas subrogatorias en los convenios colectivos organizada por la Asociación Española del Derecho del Trabajo y la Seguridad Social (AEDTSS) y el Consejo Económico y Social (CES) de Castilla y León, cuyo presidente, Enrique Cabero, hizo de anfitrión de una cita que permite “compartir las reflexiones de docentes e investigadores del más alto nivel en este ámbito con los representantes de las organizaciones empresariales y sindicales más representativas a nivel estatal y en la Comunidad”.
Se trata del segundo foro organizado con la colaboración de CESCyL y AEDTSS tras el realizado meses antes de la aprobación de la nueva reforma laboral, y en esta ocasión se aborda un “asunto complicado, de gran componente técnica y repercusión práctica” por afectar “de manera sustancial a muchas relaciones laborales que se producen en nuestro país”.
Y es que, como apuntó Cabero, se trata de “un ámbito muy importante de articulación normativa para garantizar muchos puestos de trabajo” ya que, con independencia de quien sea la empresa adjudicataria en una licitación pública, “los contratos se subrogan para mantener el empleo y evitar la extinción de los contratos de trabajo”.
Se trata por ello de una “materia crucial” para el propio sistema de relaciones laborales y de las administraciones públicas para “mantener y generar empleo de calidad”, por lo que las conclusiones del foro al respecto de las cláusulas subrogatorias en los convenios colectivos tendrán “una gran repercusión teórica y práctica en el ámbito de nuestro país”, según Cabero.
Valor del Diálogo Social
Aprovechó el presidente del CES la jornada para valorar el Diálogo Social tras “un momento complicado” durante la pandemia en el que “se alcanzaron acuerdos muy notables para nuestro sistema de relaciones laborales” gracias a la “cesión de posiciones y búsqueda de elementos comunes”, por lo que agradeció su labor a sindicatos y patronal.
“El Diálogo Social en Castilla y León es seña de identidad y hay que subrayar los acuerdos alcanzados y la voluntad de diálogo más que demostrada”, puntualizó Cabero, que consideró un “ejemplo” la labor de CEOE-CyL, UGT y CCOO así como del propio Consejo Económico y Social y sus consejeros y consejeras por “dejar a la puerta todo aquello que pueda dar dificultad para alcanzar acuerdos y adoptarlos gracias a la voluntad de consenso en los pasillos, salas y lugares de trabajo del CES”.