Sergio Hernández, nuevo fichaje de Unionistas de Salamanca FS
Unionistas de Salamanca FS acaba de cerrar uno de los fichajes más importantes del verano. El conjunto charro se ha hecho con los servicios de Sergio Hernández, pívot salmantino que llega a la Alamedilla procedente de Segunda División.
El jugador de 28 años y natural de Macotera cuenta con sobrada experiencia en categorías superiores a la Tercera División. Después de militar cuatro años en el Alhambra de Guijuelo, estuvo dos temporadas en el Albense FS, una en el FS Zamora y tres en el Atlético Benavente, su último equipo. En su palmarés cuenta con tres campeonatos de Segunda División B y un ascenso a Segunda División.
“Soy un jugador con bastante carácter dentro de la pista, muy agresivo en primera línea defensiva y en ataque me considero un jugador que intenta desahogar al equipo en la creación de juego y busca la verticalidad de cara a puerta. Soy un jugador de equipo que pone siempre todas sus virtudes al servicio del colectivo y aporta toda su experiencia”, explica Sergio Hernández.
El nuevo jugador de Unionistas de Salamanca FS confía en devolver al club la confianza que ha puesto en él y desea que el fútbol sala vuelva a sonar con fuerza en la capital del Tormes: “Lo primero que espero es poder devolver en la pista y con mucho trabajo todo el interés mostrado para que me embarcara en este proyecto, así como la confianza depositada en mí desde el primer momento. Lo segundo, ayudar al crecimiento de este bonito proyecto, desde el primer equipo pasando por todos los equipos del club. Intentando siempre dar ejemplo con nuestro comportamiento, actitud y profesionalidad tanto en los entrenamientos como en los partidos a todos los niños y jóvenes que pertenecen al club, ellos tienen que saber que son el futuro. Y, por último, intentar que todos los salmantinos se vuelvan a ilusionar con este magnífico deporte que me apasiona que es el fútbol sala, enganchar al aficionado y que se identifiquen con el club, necesitamos de su presencia en la Alamedilla todos los fines de semana para hacer de nuestra casa un fortín”.