El fútbol tiene estas cosas. Isra Salazar, un jugador de la generación de 2003 del Valladolid Promesas, salvó los muebles de un Real Valladolid que estuvo muy apático y que a punto estuvo de dejar escapar puntos ante el Amorebieta, el peor visitante de la Liga. Sin embargo, está claro que Paulo Pezzolano tiene algo de fortuna y su cambio en el descanso por Cedric, dio sus frutos. Ahora, el Pucela ya está en zona de ascenso a Primera División. El chaval de 20 años evitó el desastre en un mal partido del equipo ante su afición, sobre todo en una primera parte para olvidar.
Mal, muy mal, comenzó el Real Valladolid el partido frente al Amorebieta. Solo las acciones por la banda de Raúl Moro inquietaban a un rival que se mostraba cómodo y hasta dio dos sustos en dos acciones en los primeros diez minutos con el exblanquivioleta Morci como protagonista. El Pucela no trenzaba dos acciones seguidas y estaba muy frío en un partido lento, sin velocidad donde jugaba demasiado en horizonte. Monchu y Juric estaban sin ideas en el centro del campo y el técnico tampoco cambiaba nada de un Pucela estático al más puro estilo de muñecos de futbolín. El partido pedía ajustes, pero Pezzolano es un técnico de los que prefieren esperar a que el tiempo haga cambios, en vez de hacerlos él.
Y el susto más grande llegó en el minuto 25 cuando un pase filtrado de Sibo, con centro de Núñez y a punto estuvo de anotar Lasure al sorprender a Masip. El Amorebieta estaba muy cómodo, hasta el punto de que el equipo vasco adelantaba sus líneas, algo más comedidas en el arranque. Fue el momento en el que ya aparecieron pitos en Zorrilla ante la falta de corrección en posiciones de Pezzolano. Solo un disparo blando de Cedric, sin problemas para el guardameta visitante, sacó del aburrimiento a la grada.
Los pitos se hicieron mayores con la ocasión más clara para el equipo vasco que volvió a salvar Masip tras un disparo de Avilés. Amorebieta hacía lo mismo para crear peligro y el banquillo pucelano no lo veía. Y los pitos se hicieron protestas con lo que se veía venir. El gol vasco en el minuto 37. En un balón parado tras un córner que sin problemas cabeceó Manu Hermando. Era el momento de que alguien en el banquillo tomara el mando de un partido en el que no había soluciones.
El tanto visitante sirvió de acicate para los jugadores blanquivioleta. Moro, casi como delantero, era el hombre más activo y en sus botas estuvo el empate hasta en dos ocasiones. Así se llegó al tiempo de descanso con una imagen horrorosa y sin ideas.
Cedric paga los platos rotos
Cedric, estático y solo adelante, no hizo olvidar a Sylla, fue el encargado de pagar los platos rotos. Entró Salazar, premiando su partido y su gol copero contra el Espanyol. Pezzolano se atrevió con los jóvenes, pero dejó a los pesos pesados en el campo. Por ejemplo al desaparecido Kenedy.
Y sí, el Pucela saltó al campo con otra actitud. 45 minutos regalados. Escudero, con sus tradicionales saques de banda como si fueran córner, puso un balón en el área pequeña para el remate de cabeza de Juric, el jugador más polivalente del equipo, que desatascó el problema. Un fallo defensivo de los que hacen enfadar al entrenador, a Haritz Mujika le pasó. El gol dio más confianza al equipo, que fue creciendo con una mejor posición en el terreno de juego. Kenedy la tuvo, pero estuvo fallón en una acción en el 60.
Pezzolano hacía más movimientos y quitaba a un desastroso Anuar por Lucas Rosa. El Pucela tenía el balón, mandaba pero no acababa de poder doblegar a una SDA que se frotaba las manos con un posible punto. En el minuto 71, Moro volvió a su versión de la primera parte para poner un balón al área que se paseó por delante de la portería. Faltaba el ‘9’ para empujarla.
El Pucela planteó los últimos minutos a un ‘toma y daca’ que no gustaba nada en la grada. Era el momento de tener el balón y crear ocasiones. Pero el fútbol tiene estas cosas y el gol llegó en el minuto 87 cuando se lanzó a por todo. El chaval de la cantera, Salazar, aprovechó un balón de Montiel para dar los tres puntos. La flor de Pezzolano sigue presente.
Ficha
Real Valladolid: Masip, Luis Pérez, Boyomo, David Torres, Escudero, Anuar (Lucas Rosa, minuto 67), Monchu (De la Hoz, minuto 90), Juric, Moro (Tunde minuto 90), Kenedy (Montiel, minuto 74) y Cédric (Salazar, minuto 46).
Amorebieta: Magunagoitia, Núñez (Mier, minuto 46), Gaya, Manu Hernando, Félix, Dorrio (Edwards, minuto 60), Carbonell (Morán, minuto 60), Sibo, Lasure, Avilés (Jauregui, minuto 46), y Morci.
Marcador: 0-1 Minuto 37. Manu Hernando. 1-1 Minuto 54. Juric. 2-1 Minuto 86. Salazar.
Arbitro: Sánchez López. Amarillas para Gaya, Núñez, Mier y Escudero.
Incidencias: Jornada 19, partido disputado en el José Zorrilla ante 15.000 espectadores.